River Plate y Atlético Mineiro definieron al primer finalista de la Copa Libertadores 2024 este martes en el Estadio Monumental, en Buenos Aires, en un partido muy táctico y de aguante por parte de los brasileños.
Los de Belo Horizonte llegaron a territorio argentino con la ventaja de tres goles conseguida en el partido de ida de la semifinal, superando de principio a fin a River, pero siendo cautelosos, pues aún quedaban 90 minutos y nada estaba escrito.
Las expectativas eran muy altas, y la pregunta que todos se hacían era la misma: ¿habrá remontada? Al final no se logró la hazaña, a pesar de que el cuadro local intentó vulnerar la portería defendida por Everson. El bloque defensivo de Mineiro se comportó a la altura y evitó cualquier opción de gol del equipo riverplatense.
Al final, el 0-0 sentenció la serie y le entregó la clasificación a Atlético Mineiro a una nueva final del torneo continental, que ya supo conquistar en el año 2013 de la mano de Ronaldinho.
“Monumental” recibimiento
Al margen de lo deportivo, la hinchada de River demostró una vez más el apoyo incondicional hacia el equipo que tantas alegrías le ha dado en el último tiempo.
Las graderías del estadio estaban totalmente colmadas. La adrenalina se podía palpar, el optimismo y la ilusión de cada simpatizante por lograr la épica estaban más que presentes en el Monumental, que recibió a más de 80 mil personas anoche en la semifinal.
Se llegó el momento y los equipos saltaron al terreno de juego en el tradicional desfile desde los camerinos. Adelante, el árbitro colombiano Wilmar Roldán junto a su equipo. Detrás, los 22 jugadores y protagonistas de la noche.
En las tribunas, humo rojo, cánticos, banderas, pirotecnia en el cielo, luces apagadas y una fiesta imponente que pintaba una vez más la Copa Libertadores. Los jugadores en la cancha observaban el marco impresionante que organizaron los hinchas, quienes no dejaban de alentar.
“Si algo hay que reconocer, es al hincha de River. El sentimiento y la pasión que demostraron en estos días con un resultado adverso, con un equipo que no viene jugando bien y, sin embargo, dio la cara y nos apoyó todo el partido, con un recibimiento que, creo hace mucho tiempo no veía una cosa así”, valoró Marcelo Gallardo, estratega del club gaucho.
Ahora, Mineiro esperará rival para jugar la final el próximo 30 de noviembre, que se definirá este miércoles en Montevideo, de la otra llave semifinal que gana parcialmente Botafogo (Brasil) sobre Peñarol (Uruguay), con un marcador global de 5-0.