Un tribunal de París empezó a juzgar este martes a seis allegados del futbolista Paul Pogba, entre ellos su hermano mayor, por un intento de extorsión de 13 millones de euros (13,6 millones de dólares) en 2022. Los seis acusados deben comparecer ante la justicia hasta el 3 de diciembre en el llamado 'caso Pogba', que también incluye el secuestro del entonces jugador del Manchester United y, después, de la Juventus de Turín.
Sin embargo, el proceso había empezado con incertidumbre sobre su celebración. Los abogados de la defensa pidieron aplazarlo por motivos de procedimiento, una solicitud que fue finalmente rechazada. “El tribunal no accede a las peticiones de aplazamiento”, anunció la presidenta del tribunal, confirmando que el juicio se desarrollará como estaba previsto pese a la ausencia de Paul Pogba. Su presencia había sido requerida por los abogados de la defensa.
El caso estalló a finales de agosto de 2022 cuando su hermano Mathias difundió un video en las redes sociales, prometiendo revelaciones “explosivas” sobre Paul, sin dar más detalles. A este enigmático video le siguió otro en el que Mathias acusaba a su hermano pequeño de haber hechizado a Kylian Mbappé, su compañero de selección, a través de un “marabout”, una especie de brujo.
Los abogados del jugador, que se ausentó del tribunal, y su agente Rafaela Pimenta indicaron entonces que estas declaraciones de Mathias se sumaban a “amenazas e intentos de extorsión en banda organizada”. El futbolista internacional, que acababa entonces de firmar con la Juventus, denunció los hechos en Italia en julio de 2022, antes de ser interrogado en Francia días después.
Paul Pogba, suspendido actualmente por dopaje, aseguró a los investigadores que “unos amigos de infancia le tendieron una trampa” en la madrugada del 20 de marzo de 2022, cuando aún jugaba en el Manchester United. Estos allegados supuestamente lo secuestraron y retuvieron a punta de pistola gracias a dos encapuchados armados con fusiles de asalto, exigiéndole ese pago por “servicios prestados”.
Asimismo, estos le reprochaban no haberlos ayudado económicamente desde que se convirtió en jugador profesional. Pogba asegura que pagó 100.000 euros (105.000 dólares) de los 13 millones reclamados.
Más allá de este episodio, Paul Pogba aseguró que también sufrió presiones de estos amigos en el centro de entrenamiento de los 'Bleus', en Mánchester y en Italia. El futbolista también tuvo que abonar una factura de 57.227 euros (60.130 dólares al cambio actual), que estos gastaron en la tienda Adidas de la popular avenida de los Campos Elíseos, en París.
“Relación de hermanos”
Estos allegados niegan las acusaciones. “Era una relación de amistad (...) y, además de eso, Paul Pogba quizás les daba beneficios”, según Karim Morand-Lahouazi, abogado de uno de los cinco amigos.
Todos afirman que también fueron víctimas de la violencia y las presiones de los hombres encapuchados, que nunca fueron identificados. “Mi cliente acabó por el suelo, con las manos en la cabeza y un arma apuntándole”, agrega Morand-Lahouazi. Durante el juicio que se abre martes, los cinco deberán responder a las acusaciones de extorsión, secuestro y asociación de malhechores.
El sexto acusado, Mathias Pogba, ausente esa noche, es sospechoso de “ejercer presión a su hermano Paul y a su familia para asegurarse del pago de la suma de 13 millones de euros”, por lo que deberá responder de los cargos de intento de extorsión y asociación de malhechores.
Ante el juez de instrucción, Paul Pogba explicó que el dinero alejó a ambos hermanos, instalando una dependencia económica de Mathias hacia él. “Yo quería retomar una relación de hermanos y no una relación financiera”, declaró. Ante el mismo juez, Mathias expresó su deseo de que la “unión” con su hermano “se consolide de nuevo”.