Son dos técnicos jóvenes. Ambos buscan su primer título de Liga colombiana como entrenadores. Uno ya conoce las mieles de ser campeón en el balompié criollo: el fin de semana pasado ganó la Copa Betplay con Nacional. El otro estuvo cerca hace dos años de quedarse con la Liga, cuando dirigía al Medellín, pero la posibilidad se esfumó en una apretada tanda de penaltis en Pereira.
Efraín Juárez lleva cuatro meses al frente de Atlético Nacional. El entrenador mexicano, de 36 años, llegó a finales de agosto al cuadro verde y, desde entonces, ha logrado rescatar el ADN ganador del club antioqueño.
En ese tiempo, logró que el Rey de Copas volviera a ser una aplanadora en ataque. Hasta el momento, ha celebrado 40 goles en los 25 partidos que ha disputado en el torneo clausura. Además, desde su idea de juego, le aportó al cuadro verde algo que en el último tiempo le hizo falta: se volvió sólido en defensa.
Aunque a Nacional le han marcado 24 goles en Liga, en los cuadrangulares solo encajó cuatro dianas. Eso habla de la fuerza que encontró el verde en la parte de atrás. Sobre todo, gracias a las buenas actuaciones que han tenido jugadores como David Ospina, en quien el entrenador tiene una gran confianza.
También, gracias a la sólida primera línea de volantes que armó el técnico mexicano, quien desde su planteamiento logró que Sebastián Guzmán alcanzara un buen nivel deportivo y se convirtiera en el cabeza de área indiscutible de la formación titular.
Ese fue uno de los secretos de Nacional para ganar la Copa. De esa manera llegó el primer título de Juárez como entrenador en propiedad en su corta carrera en los banquillos. Antes de llegar a Nacional, el exfutbolista manito fue asistente técnico en Estados Unidos, Noruega y Bélgica.
Eso forjó su carácter férreo, que hasta el momento le ha servido para sortear las crisis, tanto deportivas, como fuera de las canchas, que han ocurrido este semestre al frente del cuadro verde. Ese también ha sido su harakiri. Por su forma de ser un poco provocadora, se ha tenido que enfrentar a sanciones por parte de las directivas del fútbol colombiano (que han sido desmedidas).
Sin embargo, la buena labor al frente del equipo lo certifica como uno de los mejores entrenadores del fútbol colombiano en el cierre del año. Él espera concluir el 2024 levantando la estrella 18.
El misterioso David González
David González tiene 42 años. De ellos, lleva dos siendo técnico en el fútbol colombiano. El primer equipo que dirigió fue el DIM, del que fue ídolo como arquero. En su debut en los banquillos, llevó al cuadro rojo a la final del torneo clausura del 2022.
Sin embargo, mostró un juego conservador en la final contra el Pereira de Alejandro Restrepo y no logró levantar el título. Luego, tuvo un semestre flojo con el rojo. En el apertura del 2023 no logró meter al Poderoso en los cuadrangulares. Tampoco superar la fase de grupos de la Libertadores, por lo que le pidieron el cargo.
Duró un par de meses fuera de las canchas, pero se siguió preparando. En septiembre del 2023 lo confirmaron como entrenador de un alicaído Tolima. Él asumió el cargo con más de la mitad del torneo disputado, pero logró que el cuadro pijao terminara la fase regular en la cuarta casilla con 37 puntos.
En cuadrangulares quedó segundo, detrás de Junior, a la postre campeón. Eso le dio la opción de que le permitieran consolidar un proceso. En el “Todos contra Todos” del apertura 2024, Tolima terminó segundo con 38 puntos. En los cuadrangulares también ocupó esa casilla en la zona b.
No logró meterse a la final. Sin embargo, su idea de juego logró que Tolima fuera un equipo equilibrado. En el clausura terminó cuarto con 34 unidades. Fue primero del Grupo B. Logró los puntos suficientes para liderar la reclasificación con 92. David logró que el cuadro tolimense fuera el más regular del año en la Liga. Ahora, espera conseguir su primer título como entrenador.