Este beneficio, que no aplica para las trabajadoras por días, tiene como objetivo promover la contratación formal de empleadas permanentes o internas, un sector que hasta ahora había sido excluido de incentivos gubernamentales.
El programa, denominado “Empleos para la Vida”, ofrece $ 260.000 mensuales (equivalente al 20 % de un salario mínimo legal vigente) para los empleadores que contraten nuevas trabajadoras domésticas desde junio de 2023. A diferencia de otras modalidades de trabajo, las trabajadoras “por días” no aplican al beneficio, ya que deben ganar al menos un salario mínimo mensual para ser consideradas.
(Vea también: Empleadas domésticas en Colombia, preocupadas por anuncio que hicieron sobre su salario)
Lo novedoso del programa es que los empleadores podrán postularse cada dos meses y recibir el incentivo hasta 24 veces por cada trabajadora contratada entre 2024 y 2026, lo que equivale a un apoyo significativo para promover la estabilidad laboral de estas mujeres. Además, el incentivo no solo busca la formalización, sino también la generación de nuevos empleos, lo que promete impactar positivamente el mercado laboral.
Esta iniciativa busca responder a este sector de trabajo doméstico, que tiene una informalidad laboral del 80 % frente al 55 % del promedio de informalidad del resto de sectores económicos.
“Esos 25 puntos porcentuales que hacen al sector del trabajo doméstico el de peor informalidad laboral nos dirían que la casa es hoy, como lugar de trabajo, “The worst place to work”. Gracias a las tareas que hace una trabajadora del hogar, las personas pueden salir a trabajar desayunadas, vestidas y dejar sus hogares y ser queridos atendidos. Este es el principio para un país funcione”, dijo Andrea Londoño, directora de Hablemos de Trabajo Doméstico.
Según Valor Doméstico (herramienta estadística de la Fundación a partir de datos del Dane), las trabajadoras domésticas recibieron, en promedio, en 2023, un salario mensual de $ 656.925, casi la mitad de un salario mínimo, por debajo del promedio del resto de sectores. Como dato, Medellín es la ciudad de mayores salarios para trabajadoras domésticas y el de menor informalidad.
De acuerdo con la directora de Hablemos de Trabajo Doméstico, hasta la fecha, el trabajo doméstico remunerado había quedado por fuera de iniciativas como los incentivos a la nómina empresarial durante la pandemia, la reducción de la jornada laboral y la prima de servicios. Sin embargo, este nuevo programa busca corregir esa exclusión histórica y brindar un alivio económico tanto para empleadores como para trabajadoras, especialmente mujeres mayores de 28 años, quienes constituyen la mayoría en este sector.
Según MinTrabajo, este incentivo tiene un enfoque especial en la generación de empleo y la formalización laboral de mujeres mayores de 28 años, un grupo clave para la dinamización del mercado laboral en el país.
Las postulaciones se realizarán de manera bimensual hasta 2026, permitiendo que los empleadores reciban apoyo económico continuo, mientras cumplan con las normativas establecidas, como el pago de seguridad social y la permanencia de las trabajadoras.
En un país donde el trabajo doméstico históricamente ha estado precarizado y fuera del marco formal, este tipo de políticas representan un paso adelante hacia la equidad laboral, recalcó Londoño.
Si usted es empleador y ha incrementado su nómina desde junio de 2023, puede postularse al incentivo y contribuir a la mejora de las condiciones de vida de las trabajadoras domésticas en Colombia.
Empleadores (personas naturales o jurídicas), consorcios, uniones temporales y patrimonios autónomos obligados a declarar renta que incrementen la nómina desde junio 2023.
Las terceras postulaciones serán entre el 24 y 31 de octubre de 2024.
- Haber vinculado trabajadores adicionales a la nómina desde junio 2023 y que lleven a la fecha mínimo 6 meses de permanencia.
- Tener un producto de depósito en una entidad bancaria o financiera.
- Tener al día los pagos de seguridad social y salarios de todas las trabajadoras.
Sólo aplica para trabajadoras que tengan ingresos iguales o superiores a un salario mínimo
- Formulario de solicitud firmado por empleador (personas naturales), o representante legal (personas jurídicas).
- Certificación que indique estar al día en salarios y pagos de seguridad social de trabajadores firmada por empleador o representante legal y revisor fiscal o contador público.
- RUT.
Ante las entidades financieras o cooperativas de ahorro y crédito vinculadas al programa, quienes les entregan un número de radicado a los postulantes.
Natalia Herrera, integrante de la Subdirección de Formalización y Protección del Empleo, destacó que la formalización no solo depende de los empleadores, sino también de las trabajadoras, quienes deben exigir su derecho a ser formalizadas. El incentivo es parte del programa “Empleos para la Vida”, y aunque generalmente acceden más empresas, esta vez se enfoca también en personas naturales que contraten trabajadoras domésticas.
Agregó que el incentivo no es solo un alivio económico para los empleadores, sino un paso hacia la dignificación del trabajo doméstico. Además, se otorgará un 10% adicional del subsidio si la trabajadora no ha cotizado a seguridad social en los últimos cuatro meses o si ha sido beneficiaria del Mecanismo de Protección al Cesante.
Herrera insistió en que las postulaciones se abrirán cada dos meses hasta agosto de 2026, siendo la próxima oportunidad entre el 24 y el 31 de octubre de 2024.