Aunque se había hablado inicialmente que el Presupuesto General de la Nación tendría un recorte de $33 billones para este 2024, el Ministerio de Hacienda definió que la cifra finalmente será de $28,4 billones, equivalentes a un 5,6% del total del presupuesto aprobado para el año. La decisión fue tomada en el Consejo de Ministros que hubo este martes 26 de noviembre en el Palacio.
De acuerdo con la cartera, este monto contempla tanto los $20 billones del aplazamiento presupuestal anunciado en junio, como $8,4 billones adicionales que surgen como resultado del análisis de la situación económica actual de la Nación.
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El recorte, argumentó el ministro de Hacienda, Ricardo Bonilla, se da como resultado de la caída en los ingresos tributarios, que no alcanzaron la meta esperada. Por esto, dijo, la decisión busca garantizar el cumplimiento de la Regla Fiscal y mantener la estabilidad macroeconómica del país.
En el rubro de funcionamiento se recortarán $18,2 billones. Los sectores que tendrán mayores disminuciones en esa área son Hacienda con $11,8 billones; Trabajo con $3,9 billones; Defensa con $606.000 millones, Rama Judicial con $452.000 millones y Fiscalía con $347.000 millones.
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Con respecto a la inversión, se hará un recorte de $10,1 billones que estará liderado por el sector de Inclusión Social y Reconciliación con $1,8 billones; seguido de Hacienda con $1,7 billones; Transporte con $1,4 billones; Agricultura con $1,2 billones y Vivienda con $647.000 millones.
“Aunque el Confis había sugerido un recorte de hasta $33 billones, la cifra final responde principalmente a la necesidad de contar con recursos para emergencia invernal recientemente declarada en todo el país”, señalaron desde el MinHacienda.
Y agregaron que también apunta a la preservación de inversiones fundamentales para garantizar la alimentación infantil, los derechos básicos de niños y niñas, la gratuidad en la educación superior, y la respuesta a las necesidades de agua apta para consumo humano.
Específicamente, la falta de recaudo de este 2024, que es cercana a los $25 billones, está relacionada con una anomalía en el sistema tributario del año pasado.
“La dificultad del recaudo es que, por anticipos en retenciones en la fuente, el año pasado se recaudó el impuesto renta de 2023 y 2024 al tiempo. Ese episodio no se puede repetir en el 2025 porque no hay ese tipo de anticipos este año y, por lo tanto, debe recuperarse la normalidad y el recaudo del impuesto de renta”, señaló el ministro.
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Sin embargo, explicó que el decreto se expedirá en los próximos días pero no se descarta que se dé por un monto superior a esos $28,4 billones.