El 2024 estaba a punto de acabarse sin grandes movidas empresariales para compañías del país, hasta que esta semana Cementos Argos informó que venderá su participación de 31% en la estadounidense Summit Materials, dedicada a agregados y cemento.
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La movida le representará US$2.850 millones, casi $13 billones al cambio actual, en una jugada redonda para darle valor a los accionistas. Aunque muchos pensaban que era un cierre dorado para su etapa en los Estados Unidos, lo cierto es que podría ser el comienzo de algo más grande allí.
La compañía empezó a exportar cemento desde los años 50 y en ciertas épocas ha llegado a meterse entre los jugadores más importantes de ese mercado en Estados Unidos. Incluso, en 2005 decidió entrar a competir directamente, alcanzando a ser líder en 16 estados de ese país.
Ahora el mercado espera por ver qué sigue tras salir de Summit, o mejor dicho, en qué va a invertir la plata. Juan Esteban Calle, presidente de Cementos Argos, le contó a EL COLOMBIANO los planes de la compañía, que prepara nuevos frentes para seguir liberando su valor.
“Cuando ya estábamos suficientemente maduros en el mercado de Estados Unidos, en términos de tener un buen tamaño, con una rentabilidad muy interesante, nos sentíamos listos para dar un próximo paso y se pensó en listar la compañía en la Bolsa de Nueva York, dentro de un plan estratégico para crecer en ese mercado, y mostrando una frustración grande con la Bolsa de Valores de Colombia y el precio de la acción allí, porque veíamos que la extraordinaria generación de valor hecha en Estados Unidos no se veía reflejada en el título.
Entonces, la forma de darle visibilidad era que por lo menos estuviera listada en un mercado líquido, que todos los días esté marcando precio. Eso llevó a esa aspiración de listar los activos en la Bolsa de Nueva York. Iniciamos ese camino en 2022 y cuando estábamos listos para hacerlo, en el 2023 aparece esa opción estratégica que paralelamente veníamos considerando desde hace algunos años, que era una combinación con Summit.
Se materializó y se dieron las cosas, un listamiento indirecto que complementaba los activos nuestros con los de ellos y nos daba cobertura nacional y nos sumaba agregados. Esa combinación fue exitosa. Desde el momento que nos combinamos, con la acción de ellos a US$36 en el intercambio, se destapa una cantidad de valor para Cementos Argos, US$3.200 millones, e inmediatamente se manda la señal de que había un valor gigante atrapado.
“Nos soñamos que la plataforma de Summit era de largo plazo, teníamos toda la intención de que creciera, e íbamos haciendo un trabajo mejor de lo esperado en la integración, con resultados fuera de serie, pero cuando uno lista una compañía en la Bolsa de Nueva York esta queda para la venta todos los días y pueden aparecer alternativas como la que se presentó, que es una oferta de adquisición ampliamente generadora de valor.
Entonces, se analiza al interior de la junta de Summit y por nosotros como accionistas principales de la compañía. Nos damos cuenta de que es una alternativa extremadamente buena y ahí se toma la decisión de aceptar la transacción, que marcará un valor muy importante para la compañía. Son $10.000 por acción de Cementos Argos, equivalente en esa oferta de US$52,50.
Eso cierra muy bien un capítulo de 20 años (en EE.UU.) con una rentabilidad extraordinaria para los accionistas. Nosotros quedamos con la misma exposición a seguir exportando cemento a EE. UU., porque tenemos un contrato de suministro de cemento que va a heredar Quikrete (empresa que hizo la oferta por Summit), con la posibilidad de exportar cemento a otras zonas de Estados Unidos, desarrollar la plataforma de exportación de agregados y con un sueño de complementar esa plataforma.
Queda, de todas maneras, Argos Latam totalmente conectado con el mercado americano y nosotros con la posibilidad absoluta de pensar en un despliegue de esos recursos inteligente y paciente buscando generación de valor para nuestros accionistas en el mismo mercado americano, pero ya con una amplia experiencia allí. Consideramos que esta compañía necesita mantener esa exposición”.
“Todos los análisis que se hicieron en la valoración muestran que ese es un precio extremadamente bueno, que compensa absolutamente todo el plan de negocios que tenía la compañía, si no, no se hubiera aceptado. Entonces, en nuestra opinión, ahí están más que compensados esos planes de crecimiento futuro que se tenían en esa plataforma.
Cuando uno mira el múltiplo real de salida de materialización de valor de lo que construimos en Estados Unidos y es 15,4 veces, es extraordinario. Uno ve lo que están transando otras compañías, y 15 es demasiado bueno. Queda la oportunidad de hacer un despliegue de recursos inteligente, paciente y generador de valor a futuro”.
“Se firmó un acuerdo entre Summit y Quikrete, pero falta el cierre. Los cierres nunca son totalmente ciertos, entonces la gran realidad es que faltan autorizaciones regulatorias, un voto en la asamblea de accionistas de Summit y el cierre posterior de la transacción. Lo que ha anunciado Summit es que espera que este cierre se dé en el primer semestre del 2025”.
“Estábamos listados indirectamente y conseguimos ese objetivo para la plataforma de Estados Unidos. Pensamos, de todas maneras, que la acción sigue subvalorada en la Bolsa de Valores de Colombia. Transando en $10.000 o por debajo, está reflejando nada más esos US$2.850 millones que recibiremos por la venta del 31% de Summit.
Quiere decir que todos los otros negocios de la compañía (Colombia, Centro América y el Caribe) que hoy generan cerca de US$300 millones de Ebitda, están valorados a cero. Pensamos que, en la Bolsa de Valores de Colombia, a pesar del esfuerzo gigante que hemos hecho con sprint y sprint 2.0 y la recuperación gigante del precio de la acción, esa brecha contra el valor fundamental no se ha cerrado.
Por eso vamos a lanzar sprint 3.0 en el primer trimestre del 2025, en una serie de iniciativas adicionales que nos lleven a seguir cerrando esa brecha de valor”.
“Todavía no queremos contar sobre el mismo, pero tendrá un capítulo de cómo vamos a reinvertir esos recursos importantes que recibiríamos al cierre de la transacción, le señalaremos al mercado que estamos convencidos de que seguiremos rentabilizando los activos existentes y hablaremos de cómo darle mayor liquidez a la acción y otros temas a contemplar a futuro para estar en otros mercados de valores con mayor liquidez y se reflejen mejor los precios de las compañías, porque seguimos con frustración de que, a pesar de todo lo que hemos hecho, hay todavía un valor que no se está viendo reflejado”.
“Ese valor lo tiene que dar el mercado, pero claramente, nuestros activos en Centroamérica y el Caribe y en Colombia, que generan US$300 millones de Ebitda al año, no valen $0. Uno le puede poner cualquier múltiplo a esos US$300 millones al año, pero no es $0. Ahí hay mucho valor escondido”.
“Muy contentos con los resultados de este 2024, cerraremos un año positivo siguiendo todos los compromisos que hicimos con sprint 2.0. Hablamos de mejoramiento de márgenes y los últimos resultados que entregamos, al cierre del tercer trimestre, muestran una expansión de aproximadamente 100 puntos básicos en los márgenes, vamos a cerrar con un margen por encima del 22%.
También cumpliremos el guidance que le dimos al mercado de generación de Ebitda, seguramente por encima de los US$1.150 millones de Ebitda.
En Colombia muy bien, a pesar de que estamos navegando un mercado complejo por lo que está pasando en vivienda e infraestructura, la demanda de cemento está golpeada en el país, pero el esfuerzo que ha hecho el equipo es excepcional en excelencia operacional, optimizaciones logísticas o propuestas de valor al cliente.
En Centroamérica y el Caribe muy bien. Honduras, creciendo cerca de 7% en volúmenes; Panamá, con la transición de gobierno, un poco lenta la demanda, pero con buenas perspectivas a futuro, y en el Caribe un gran crecimiento, sobre todo en República Dominicana”.
“Nosotros tenemos una visión ampliamente positiva, optimista y de largo plazo en relación con Estados Unidos. Hemos visto que tanto republicanos como demócratas coinciden en la importancia de la infraestructura y la vivienda en ese país. Además, hay un déficit en el mejoramiento de infraestructura, que con la ley de infraestructura de Biden ha empezado con inversiones interesantes, pero igual hay una brecha que durará años para cerrar. Uno ve lo que está pasando con el cambio climático, las ciudades van a tener que hacer inversiones gigantes en infraestructura contra ese fenómeno en las costas, y Estados Unidos está lleno de grandes ciudades allí. Entonces, somos optimistas con el futuro de la industria en ese mercado.
Veremos cómo termina el tema de aranceles, pero existe la particularidad de que Estados Unidos es deficitario en cemento, no tiene suficiente producción nacional, e importa cerca del 20% del que se consume. Si hay un arancel, ese 20% va a seguir llegando allá, son cerca de 22 millones de toneladas”.
“Que los subsidios no sean 50.000 sino 20.000 es una noticia que no es buena para nada. Es un sector clave para la reactivación del país en la generación de empleo. Si esos subsidios llegan a ser 20.000 tendrá un impacto, sobre todo para las familias y eso es doloroso, pero el otro impacto será sobre la economía. Entonces, visualizamos un 2025 como otro año de transición, en el que no prevemos una dinámica de crecimiento importante en la demanda, pero como compañía estamos listos”.
“Estamos trabajando en Puerto Antioquia, donde somos proveedores, es un proyecto transformacional; también, en el Túnel del Toyo, y en las grandes obras. Nosotros hemos participado en la construcción de cerca del 80% de la infraestructura de Colombia. Y en Estados Unidos, por ejemplo, suministramos concreto para el estadio de los Atlanta Falcons y en otros proyectos como bodegas, centros logísticos o data centers para Google, Facebook o Amazon”.
“Colombia tiene que seguir soñando en grande y la infraestructura es la columna vertebral de la competitividad y el bienestar, entonces claramente nos faltan muchas cosas para hacer”.
“Creemos que será muy bien recibido por el mercado. En lo que conocemos, que es la información pública, nos hace todo el sentido”.