Un nuevo hecho sacude la presidencia de Jorge Carrillo en Interconexión Eléctrica (ISA). Esta vez, la Cámara de Comercio de Medellín para Antioquia (CCMA) decidió suspender su inscripción como representante legal de la compañía.
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Esto, luego de un recurso de reposición presentado el pasado viernes por el accionista Julio César Yepes contra la designación de Carrillo.
“Por lo anterior, la inscripción recurrida se encuentra bajo el efecto suspensivo previsto en el artículo 79 del Código de Procedimiento Administrativo y de los Contencioso Administrativo”, informó la CCMA.
Según ese artículo, los recursos de reposición y de apelación deben tramitarse en el efecto suspensivo. Además, tienen que “resolverse de plano, a no ser que al interponerlos se haya solicitado la práctica de pruebas, o que el funcionario que ha de decidir el recurso considere necesario decretarlas de oficio”.
“En un hecho sin precedentes”, afirmó el concejal de Medellín, Alejandro de Bedout, quien ha seguido de cerca las polémicas alrededor de la llegada de Carrillo a la compañía de transmisión de energía.
Según él, “este nombramiento, que ya se encontraba bajo la lupa judicial, ahora enfrenta cuestionamientos administrativos que ponen en duda la transparencia y legalidad del proceso”.
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El concejal describió cómo el accionista Yepes también ha señalado “serias irregularidades” en el documento que soporta el nombramiento de Jorge Carillo.
“Dicho documento, que se limita a afirmar de manera genérica que la Junta Directiva eligió ‘por mayoría’ a Carrillo, incumple los requisitos mínimos exigidos por el reglamento de la Junta Directiva, los estatutos de la empresa y la normativa vigente”, ejemplificó.
“Según Yepes, las omisiones son graves y numerosas. El acta no detalla el número de votos a favor y en contra que respaldaron la elección, ni ofrece justificación alguna sobre los elementos que fundamentaron la decisión. Tampoco registra las posturas de los miembros de la Junta Directiva ni especifica la modalidad de votación utilizada. Estas omisiones no solo constituyen una falta de rigor, sino que también vulneran las normas internas de ISA y los principios básicos de transparencia que deberían regir en una empresa de interés nacional”, continuó el concejal.
Pese a esta decisión de la Cámara de Comercio, se conoció que Carrillo seguiría recibiendo sus honorarios como presidente. Esto deja en entredicho el futuro del gobierno corporativo de la compañía y se suma a otros hechos de incertidumbre.
Por ejemplo, en noviembre se conoció que Carrillo llevaba tres meses en la presidencia de ISA, pero no había podido firmar como representante legal porque su nombramiento no había sido formalizado.
El lío tiene que ver con las actas de su elección, que como lo dijo el concejal de Bedout, aún no se hacen públicas y no podrían sustentar la decisión. Además, se dice que algunos representantes de accionistas minoritarios ni siquiera las firmaron, lo que eleva más la incertidumbre.
El caso llegó hasta el Consejo de Estado, que a inicios de este mes aceptó una demanda para anular el nombramiento, presentada por el diputado de Antioquia, Luis Peláez.
De hecho, desde noviembre el alto tribunal le solicitó a la junta de ISA que entregue las actas redactadas de la reunión en la que se eligió a Carillo, a modo de testimonio de la veracidad del cargo.
El proceso sigue siendo un misterio y desde el lado de ISA solo se ha resuelto solicitar al Consejo de Estado que declare la reserva sobre los documentos relacionados con el proceso de nulidad electoral que cuestiona la elección.