Fue sorprendente que apareciera entre los titulares del Al-Nassr. Jhon Jáder Durán solo había tenido un entrenamiento con sus compañeros del equipo árabe, con el que cerró su vínculo el viernes pasado en Londres a cambio de 77 millones de euros.
El delantero antioqueño, de 21 años, no jugaba desde el 26 de enero de 2025. Ese día disputó los últimos 24 minutos del empate 1-1 entre Aston Villa y West Ham United, válido por la fecha 23 de la Liga Premier de Inglaterra.
Además, la última vez que salió entre los once inicialistas de un duelo, fue el 26 de diciembre del 2024, en la típica jornada del “boxing day” de Inglaterra. Aquel día su equipo perdió 3-0 contra Newcastle en St. Jame’s Park.
Esa fecha quedará marcada en la historia del jugador porque recibió la primera expulsión de su carrera en territorio inglés. Después de luchar una pelota en profundidad con el defensa suizo Fabian Schär, Jhon Jáder le pisó la espalda con los taches de su guayo.
El juez central del encuentro le sacó roja cuando corría el minuto 34. Le dieron tres fechas de sanción. El atacante, habitual convocado a la Selección Colombia, regresó a las canchas el 18 de enero, en la igualdad a dos goles entre su exequipo y Arsenal. En aquella ocasión disputó 10 minutos.
A pesar de todo eso, el entrenador italiano Stefano Pioli, quien dirige al Al-Nassr, decidió poner a Durán como inicialista en el triunfo 4-0 de su equipo ante Al-Wasl, de los Emiratos Árabes Unidos, en duelo válido por la séptima fecha de la Champions de Asia.
Pero ahí estuvo. El talento de “la nueva joya” del equipo que pertenece al Fondo de Inversión del gobierno saudí, se impuso a la lógica. Salió, vestido de amarillo, del túnel que separa los camerinos de la cancha en el estadio Al -Awwal Park, con la misma seguridad de siempre.
Después de saludar a los miles de aficionados vestidos con la típica dishdasha blanca en las tribunas, se paró al lado de Cristiano Ronaldo. Sí, la presencia de Durán obligó a un cambio de esquema por parte del entrenador.
De jugar solo con un “nueve”, pasó a tener dos y, la línea de volantes de ataque dejó de ser de tres (dos extremos y un enganche) a ser de cuatro futbolistas: dos mediocampistas por las bandas complementaban el trabajo de los compañeros que estaban en el centro.
39 días después de su última titularidad, el futbolista colombiano respondió. Cuando iban 42 minutos del primer tiempo, dio muestras de su carácter: reclamó al juez central una mano de un rival dentro del área después de un cabezazo de Sadio Mané.
La jugada terminó en penalti. Cristiano Ronaldo anotó el segundo tanto del encuentro. El primero lo hizo Ali Alhassan, cuando iban 25 minutos. El gran aporte del antioqueño, disipando las dudas de si podía o no compartir el frente de ataque con el atacante luso (llegó a 924 celebraciones como profesional), se vio en la tercera anotación.
Durán, con un movimiento en diagonal dentro del área, arrastró la marca de uno de los defensas centrales del equipo rival y abrió un espacio para que, desde atrás, Cristiano Ronaldo saltara pasando el punto penalti, cabeceara el balón que centró del extremo senegalés Sadio Mané y celebrara su segunda diana de la noche.
La cuarta celebración de la noche la puso Mohammed Al-Fatil, a dos minutos del final del tiempo reglamentario. La presencia de Jhon Durán, primer fichaje estelar de un futbolista joven, fue la sensación en su primer duelo con el Al-Nassr. En Arabia, inicialmente, tendrán 5 años para disfrutar del fútbol del joven colombiano, que no marca desde el 21 de diciembre de 2024, cuando le convirtió al Manchester City de Pep Guardiola.