Tras la tensa jornada de domingo que por unas horas dejó pendiendo de un hilo la relación comercial entre Estados Unidos y Colombia, Analdex, gremio del comercio exterior colombiano, divulgó una carta abierta que tituló “Lecciones de una crisis”.
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Entre otras cosas, describió cómo la imposición de aranceles por parte de EE.UU. hubiera tenido un efecto más importante en Antioquia, el Caribe y el Eje Cafetero, zonas para las que la potencia mundial tiene un peso de 31,2%, 17,6% y 28,8%, respectivamente, en las exportaciones.
“Igualmente, para el café significa el 40% de las ventas externas totales y para las flores, aproximadamente 80%”, continuó.
En su carta resaltó el tiempo que ha tomado la construcción del Tratado de Libre Comercio (TLC) con Estados Unidos, y que “no se puede borrar de un plumazo en una tarde de domingo, vía redes sociales”.
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En esa dirección aprovechó para poner de por medio tres lecciones de esta crisis. La primera es “ver a Estados Unidos como un aliado y no como un enemigo”. Allí hizo hincapié en que lo que viene será clave para sanar las heridas, y que los temas de migración y narcotráfico coparán la agenda.
La segunda lección está relacionada con los “interrogantes de cómo se aplican los aranceles por motivos de seguridad nacional”. Para Analdex, se debe hacer un análisis profundo y a conciencia de los mismos.
Y la tercera es que, como país, “no debemos tener todos nuestros huevos en una misma canasta”. Apunta que esto hace notorio el debate de la diversificación de las ventas de Colombia a otros mercados y la necesidad de buscar fortalecer las relaciones con países de Asia, por ejemplo.
“Vendrán tiempos de ‘slowbalisation’ y Colombia debe saber jugar este juego comercial, donde la geopolítica quiere imponer nuevas reglas. Solo hay un fin: salir victoriosos en medio de tantas coyunturas que están andando en detrimento del intercambio comercial de bienes y de servicios a nivel mundial”, cierra la misiva.