El 2024 fue el año en que el café colombiano tuvo la producción más alta de los últimos cinco años, con 13,99 millones de sacos de 60 kilogramos, lo que significó un aumento de 23,3% frente a los 11,38 millones de 2023. Sin embargo, el tradicional Eje Cafetero, conformado por Caldas, Risaralda y Quindío, no fue el que más aportó al sector: lo hicieron los departamentos de Huila, Antioquia, Tolima y Cauca.
Según la Federación Nacional de Cafeteros (FNC), las regiones que más aportaron el año pasado a la producción cafetera fueron Huila, con un poco más de 145.759 hectáreas de café cultivadas; seguido de Antioquia con 114.312 hectáreas, Tolima con 106.852, y Cauca con 94.442. En su conjunto, estos departamentos representan el 54,8% del área cultivada a nivel nacional y el 51% de los caficultores del país.
Por esto, en una de sus declaraciones pasadas, el exministro de Hacienda, Ricardo Bonilla, los calificó como el ‘nuevo eje cafetero’, pues Quindío, Caldas y Risaralda, que antes fueron los mayores productores del grano, ya concentrarían solo el 24% de los caficultores y aproximadamente el 30% de la producción en el país.
¿Qué pasa?
La siembra de café en el tradicional Eje Cafetero ha disminuido en los últimos años, debido a factores como la baja productividad, el cambio climático y la deserción de los recolectores.
Por ejemplo, Risaralda pasó de tener unas 59.000 hectáreas de café sembradas en 2002 a 42.000 en 2023, con una disminución del 20%. Quindío también pasó de tener 44.000 hectáreas en ese mismo año, a 18.000; mientras que Caldas bajó de alrededor de 88.800 a 58.000. Por el contrario, el área sembrada en Huila creció más de un 80% en esos 23 años.
De hecho, dado el protagonismo que ha tomado el Huila como mayor productor de café en Colombia durante ya más de 13 años, el representante a la Cámara Julio César Triana ha pedido que este sea incluido en el Paisaje Cultural Cafetero de Colombia (PCCC).
“El paisaje cultural cafetero de hoy no es el de hace una década, y por eso este Congreso en pleno aprobó una proposición, cuyo autor está hablando, en la que pedimos incluir el nuevo eje o cordón productor de café. Me refiero al Huila, Nariño y Cauca, pero especialmente al Huila, donde de 37 municipios, 35 dependen del café y 29 han conjugado la actividad turística con la cafetera”, dijo en declaraciones pasadas.
El mercado cafetero colombiano no paró de alcanzar hitos la semana pasada. El viernes la carga de 125 kilos terminó en $3.000.000, una cifra histórica que refleja las tensiones que atraviesa el sector tanto a nivel local como internacional.
En cuanto al mercado externo, el precio del grano también se ha disparado, llegando a US$3,77 por libra, un reflejo de las dinámicas globales que han llevado al café a cotas nunca vistas.
Y es que desde hace unos meses, la sequía en Brasil y la baja exportación de Vietnam, países en donde se concentra el 56% de la producción mundial de café, han generado que los precios internacionales se disparen.
Mientras Brasil ha estado sorteando su peor sequía en siete décadas, las exportaciones de grano de Vietnam en los primeros tres meses de la cosecha de 2024-2025 fueron un 37,3% menores que el mismo período de la cosecha anterior.
No obstante, Germán Bahamón, gerente de la Federación Nacional de Cafeteros, ha hecho un llamado a no bajar la guardia y, por el contrario, tomar medidas para fortalecer el sector, tales como impulsar el consumo interno, priorizar la calidad del grano colombiano y desarrollar nuevos mercados.
Sobre este último punto, el país le está apostando al mercado chino. Esto, puesto que si bien el té sigue siendo la bebida tradicional en el gigante asiático, la demanda de café continúa creciendo, especialmente en las zonas urbanas.
Según cifras de la FNC, el Dane y la Dian, en el primer trimestre de 2024 China alcanzó a ser el segundo comprador más importante de café de Colombia por detrás de Estados Unidos.
Vale recordar que este país asiático pasó de ser el decimoctavo destino para las exportaciones colombianas de café en 2019, a ser el sexto destino en 2023, con 540.000 sacos de 60 kilogramos.
“Sin lugar a dudas, China es un mercado muy atractivo para los exportadores de café del país, porque el consumo viene aumentando fuertemente año tras año y es fundamental para nuestro café acompañar ese crecimiento”, señaló Gustavo Gómez, presidente de Asoexport.
Por ahora, mientras los precios internacionales siguen al alza, el llamado de los cafeteros y gremios es a evitar tensiones comerciales con grandes economías, pues más de medio millón de familias cafeteras colombianas dependen de relaciones internacionales estables en un mercado global cada vez más desafiante.