La inteligencia artificial (IA) ha generado titulares nuevamente al identificar una característica extraordinaria que, según su análisis, “solo los dioses deberían tener”. Sin embargo, esta condición se presenta en algunos humanos, haciendo de ellos un fenómeno singular digno de estudio.Un fenómeno que trasciende las acciones humanasEsta condición, según la IA, no está relacionada con lo que una persona puede hacer o aprender, ni se trata de habilidades o logros.