César Jiménez Flechas

El grupo criminal del ELN, mientras le decía al Gobierno del presidente Gustavo Petro que se estaban encaminando en un proceso de paz, le atravesaban una válvula a las ‘venas’ de Colombia para robarse los hidrocarburos en el oleoducto Caño Limón – Coveñas. Los vehículos que usaban para esa actividad fueron objeto de medidas cautelares por parte de la Fiscalía.Por años, esta banda de delincuentes, que se arropan con uniformes de insurgentes, se dedicó a atacar y atracar al Caño Limón – Coveñas.

Una verdadera tragedia vivió una familia que esperaba a dos de sus seres queridos luego de asistir al concierto de Shakira, en Bogotá. La pareja salió del evento y tras tomar un taxi terminaron secuestrados y sometidos en el sur de la capital. La noticia rápidamente se difundió y la Policía ordenó diferentes operativos, principalmente, en la localidad de Chapinero.

Un operativo del Ejército, la Policía de Carabineros y el Cuerpo Técnico de Investigación de la Fiscalía General permitió la incautación de más de 14 toneladas de insumos utilizados para la fabricación de explosivos en el barrio Los Naranjos, de la ciudad de Popayán, en el departamento del Cauca.Se trata de un importante golpe a las disidencias de las Farc y una labor de prevención de posibles ataques terroristas de esta organización criminal en contra de la población civil y la fuerza pública.

Pegarse a los oleoductos como sanguijuelas es apenas la primera parte de una estructura criminal que cogió por su cuenta el hurto de hidrocarburos en el Putumayo.La dirección de carabineros y protección ambiental, el comando de departamento de Policía Putumayo y Ejército Nacional se lanzaron con un fuerte operativo contra las organizaciones que, como las Disidencias de las Farc, se fortalecieron con este negocio criminal.

Dos resoluciones y una promesa de campaña de Luz Adriana Camargo se convierten en el derrotero para la investigación en la actual administración de la Fiscalía. El cúmulo de demandas por errores en los procedimientos y la elevada cifra de casos perdidos en juicio marcaron el nuevo rumbo del ente acusador. Al llegar a la Fiscalía, Luz Adriana Camargo encontró cifras de esclarecimientos de hechos criminales que resultarían envidiables en cualquier parte del mundo. Sin embargo, los datos no cuadraban con el porcentaje de las condenas como indicador de cierre de los procesos.