Fue imputado por la JEP como el máximo responsable y con esto pretende dignificar a las 296 víctimas directas de hechos cometidos entre el 2005 y el 2008.
En Barranquilla señalaron a un hombre de haber intentado asesinar a su esposa en medio de una riña. La dejó gravemente herida en su rostro, pecho y manos.