A pesar de los diferentes desafíos que enfrentan las fabricantes, la tecnología ha avanzado notablemente durante las últimas décadas. Ahora que los smartphones son de gran importancia para el día a día, la conectividad a internet cuando no hay una red WiFi de confianza depende de una red móvil que establece la conexión a través de una tarjeta SIM.
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Qué significa SIM, del celular
Durante los últimos 20 años, la tarjeta SIM ha jugado un papel fundamental en las telecomunicaciones móviles. Si bien el desarrollo de la primera tarjeta SIM se conoció en 1991 por parte de la compañía alemana Giesecke+Devrient, inicialmente no era posible navegar en internet por esta vía. Su tamaño era similar al de una tarjeta de crédito y su nombre global corresponde a las siglas en inglés de la tecnología “Módulo de Identidad de Suscriptor” (SIM).
A lo largo de estos años el tamaño de las tarjetas SIM ha evolucionado, pasando por épocas de mini SIM (la que la mayoría conocimos al inicio), hasta las micro SIM y nano SIM que eliminaron el plástico innecesario alrededor del chip. Pero su propósito sigue siendo el mismo: controlar la autenticación, la identidad y la seguridad en una red móvil elegida por el usuario.
Con un mundo cada vez más digitalizado, la evolución de la SIM Card se dirige hacia la eSIM o SIM Virtual, un avance tecnológico que elimina la necesidad de colocar el chip físico al momento de estrenar celular o para obtener cobertura y acceso a la red durante los viajes fuera del país; una innovación que agiliza el proceso de conectarse a la red y permite una mayor flexibilidad y comodidad, ya que tanto el proceso de compra como la activación puede hacerse desde cualquier lugar.
En Colombia, en 2018 la operadora Claro lanzó la primera eSIM del país, que en aquel entonces permitía conectar el número principal a un reloj inteligente. Ahora, la eSIM se está convirtiendo en el nuevo estándar, y poco a poco está reemplazando el chip físico gracias a que cada año están llegando al mercado nuevos smartphones compatibles con la tecnología de SIM virtual, por lo que todas las principales operadoras en el país ya ofrecen este servicio.
De hecho, se espera que la eSIM se convierta en la norma en los próximos años, a medida que los fabricantes de dispositivos y operadores móviles continúen adoptando esta tecnología. Si bien ya son cientos de modelos de celulares compatibles, uno de los más sonados es el caso de Apple, que en 2022 lanzó en Estados Unidos un modelo de iPhone 14 sin ranura para SIM física, por lo que solo puede conectarse a la red mediante una SIM virtual.
Conectividad sin interrupciones
Una de las principales ventajas de esta evolución tecnológica es sin duda el comienzo de una era de mayor flexibilidad y comodidad para los usuarios. La SIM virtual permite cambiar fácilmente de operador, de proveedor, e incluso hay algunos smartphones que permiten añadir varios perfiles de redes y contar con dos o más líneas en un mismo equipo.
Esto es ideal en muchos casos, pero sin lugar a dudas facilita bastante las cosas a la hora de viajar al extranjero. En lugar de tener que llegar al destino y buscar una tienda en la que se pueda adquirir una SIM física de algún operador local, los usuarios pueden comprar una eSIM vía online y activarla también de forma remota justo antes de su viaje. Esto les permite contar con conectividad en su destino desde el primer instante en el que aterrizan, pudiendo acceder a todas las herramientas disponibles en un teléfono inteligente como mapas locales, búsquedas de lugares, llamar o escribir a seres queridos, o contratar un servicio de taxi de forma segura.
“Los viajeros de hoy en día necesitan tener el control de todo. Buscan todo por su cuenta, se informan para revisar diferentes opciones y van armando todo su destino y experiencia a su medida. Además, se mueven bastante durante los viajes y utilizan aplicaciones casi que para todo. Esto demanda estar conectados todo el tiempo, desde el primer momento en que llegan a un nuevo lugar”, explica Maria Yepes, head of affiliates & customer engagement en Sim Local.
Más allá de los teléfonos inteligentes, las eSIM tienen un rol fundamental en el ecosistema del Internet de las cosas (IoT), permitiendo integrar a la red desde relojes inteligentes hasta vehículos conectados.
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Un avance en la seguridad
Las eSIM traen consigo otras características de gran importancia para el mundo digital, como mejoras a nivel de seguridad con respecto a las SIM físicas tradicionales.
Al estar integradas en un dispositivo, las eSIM no se pueden eliminar o robar físicamente, a diferencia de las SIM físicas, que pueden extraerse y ser usadas para estafas como suplantación de identidad. Asimismo, la gestión remota permite que, en caso de pérdida o robo de un dispositivo, sea mucho más sencillo desactivar el perfil de la eSIM, evitando el uso no autorizado.
Además, las SIM virtuales pueden admitir protocolos de cifrado más fuertes y procesos de autenticación seguros, lo que proporciona una mayor protección para los datos de los usuarios.