Mientras que algunos miran con atención la llegada del nuevo iPhone, los dueños de otros dispositivos cuentan con algunas soluciones caseras para inconvenientes tan básicos como un cable roto en el cargador.
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Truco casero para arreglar el cable roto de un cargador de celular
Un cordón sirve para la reparación casera de este dispositivo, con un amarrado especial con lo que se logra restaurar la forma y proteger la zona que esta expuesta, por lo que es probable que se presenten las fallas.
En el acordonado se deja un pequeño hueco alargado, paralelo al cable del cargador y proporcional al espacio que se quiere cubrir. De ahí, se empieza el amarre fuerte que pase por encima de los dos pedazos de cordón que crearon el vacío mencionado antes.
Por el espacio final, se pasa el último pedazo de cordón por el restante del hueco y, con unas tijeras, se cortan las partes en ambos extremos para acabar este truco para la corrección del cable roto en el cargador.
Así, después se prueba que esté funcionando correctamente y que haya servido este paso, que evitará que se ande buscando un nuevo dispositivo de carga.
¿Por qué no funciona el cargador del celular?
- Cable dañado: puede estar roto, doblado o desgastado, impidiendo una buena conexión.
- Cargador defectuoso: el adaptador del cargador podría estar averiado o no ser compatible con tu celular.
- Puerto de carga sucio: la suciedad o residuos pueden obstruir el puerto de carga del teléfono.
- Batería dañada: en algunos casos, el problema puede estar en la batería del celular.
- Software con errores: rara vez, un problema en el software del teléfono puede interferir con la carga.
Los expertos de Móvil Zona indican que, para saber qué pasa, las personas pueden buscar signos de desgaste o daños y probar con otro cable o cargador si hay uno a mano. Si esta sucio el puesto, se puede limpiar el puerto con un objeto pequeño y suave (como un palillo de dientes) para eliminar cualquier obstrucción.
¿Cómo quitar el color amarillo de los cables?
Para la limpieza de un cable que se puso amarillento, hay alternativas muy sencillas al alcance de la mano en casa:
- Preparar una pasta: mezclar bicarbonato de sodio con agua hasta obtener una consistencia pastosa.
- Aplicar: con un cepillo de dientes, frotar suavemente la pasta sobre la zona amarilla del cable.
- Esperar: dejar que actúe unos minutos.
- Enjuagar: retirar la pasta con una esponja húmeda y secar el cable.