El mercado financiero colombiano está a la expectativa de lo que podría ser otro gran movimiento empresarial, luego de la separación de Nutresa del Grupo Empresarial Antioqueño (GEA), quedando en manos del Grupo Gilinski y sus socios árabes. Ahora, los ojos están puestos en el Grupo Argos, que podría estar preparándose para salir de su participación en Grupo Sura, según especulaciones del mercado.
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Después de la transacción que involucró a Nutresa, Argos ha dejado claro que no tiene interés en controlar un negocio financiero como el de Sura, ya que la compañía busca concentrarse en su núcleo de operaciones, enfocado en infraestructura, energía, cemento y otros sectores relacionados. En este contexto, Argos está evaluando su participación en Sura, la cual mantenía antes de las negociaciones con los Gilinski y que aumentó tras la venta de Nutresa. Entre las opciones que se barajan, una venta de esa participación parece estar en el horizonte, y la decisión podría estar cerca.
Actualmente, Grupo Argos controla los derechos económicos de aproximadamente el 42% de Grupo Sura. ¿Por qué podría estar gestándose otro mega negocio? Porque Argos ha convocado a una asamblea extraordinaria de accionistas para el próximo 21 de octubre, en la cual se discutirán potenciales conflictos de interés que podrían surgir en la junta directiva y entre sus administradores al tomar decisiones sobre la participación de la empresa en Sura.
La empresa ha comunicado que, con el apoyo de asesores externos, ha avanzado en el análisis de diferentes alternativas estratégicas relacionadas con su inversión en Grupo Sura. Tras completar esta etapa, el siguiente paso es que la junta directiva inicie la deliberación y tome una decisión, pero antes deberán cumplirse los trámites de gobierno corporativo en relación con los posibles conflictos de interés.
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Aunque a la fecha no se ha adoptado ninguna decisión concreta, es posible que después de la asamblea del 21 de octubre se conozcan las primeras resoluciones sobre el futuro de Argos en Sura. En el caso de que se concrete una venta, las estimaciones iniciales apuntan a que podría superar los 5 billones de pesos, lo que representaría un gran movimiento en el mercado financiero colombiano.
Si este escenario llegara a materializarse, significaría el desmantelamiento definitivo del “enroque” antioqueño, que ha mantenido estrechamente vinculados a Argos y Sura. Con la eventual venta de la participación de Argos en Sura, se pondría fin a una estructura de control corporativo que ha marcado la historia del Grupo Empresarial Antioqueño.
Mientras tanto, la expectativa de una posible venta ha impulsado al alza las acciones de Grupo Sura en el mercado, reflejando el interés de los inversores por los cambios estratégicos que podrían estar por venir.
Las acciones de Grupo Sura se disparaban 5,34% a $30.400 y las preferenciales avanzaban 0,66% a $21.240.