Cuando el alcalde de Cali, Alejandro Eder, llegó en enero pasado a su cargo, se propuso asegurar para Cali la sede de la COP16, porque vio en ello una oportunidad para que la ciudad se reconciliara después de años duros en lo económico y social, y encontrara nuevas proyecciones.
Movió muchos hilos hasta lograrlo y, desde febrero, cuando todo se oficializó, ha venido trabajando con el Gobierno Nacional y la Gobernación del Valle “de forma colaborativa, aguerrida y a contrarreloj”, para que hoy la ciudad se exhiba ante el mundo, y los miles de visitantes extranjeros, pero también sus paisanos, puedan disfrutar una movilidad única, una logística que sea impecable y un sistema de seguridad con las mayores exigencias.
“Aquí los caleños no solo seremos espectadores, sino los anfitriones de un evento sin precedentes. Sin duda, es un momento clave para mostrarle al mundo la calidez y hospitalidad de nuestra gente. Queremos que cada visitante se sienta bienvenido, que veauna urbe abierta al diálogo y comprometida con el medio ambiente”.
Qué va a significar para Cali ser la sede de la COP 16?
Es una oportunidad histórica que coloca a nuestro país y a la capital del Valle del Cauca en el mapa global de la sostenibilidad y biodiversidad. Va a posicionar a Cali como referente en el tema del cuidado del medio ambiente, a nivel mundial.
¿Cuánto dinero le ha costado a la ciudad la organización del evento?
La ciudad ha invertido alrededor de 60 mil millones de pesos y el Gobierno Nacional también ha depositado una cantidad significativa, entendiendo que este esfuerzo económico es un compromiso que refleja nuestra visión de futuro. No obstante, cada peso invertido se multiplicará en beneficios económicos para Cali y sus habitantes, pues esperamos que la COP16 genere entre 25 y 30 millones de dólares, impulsando sectores como el turismo, la gastronomía y el comercio de nuestra ciudad y los alrededores.
¿Cómo se manejará, por ejemplo, el transporte para los invitados?
Será eficiente y verde, en línea con nuestro compromiso ambiental y en consonancia con el espíritu de sostenibilidad del evento, pues trabajaremos con buses eléctricos. Tendremos cinco rutas especiales del MIO, liderado por Metro Cali, que conectarán los principales hoteles con los lugares de las actividades de la COP16.
Estos transportes, que serán escoltados por la Policía Nacional, harán paradas en las zonas de mayor ocupación hotelera y tendrán como destino la Zona Azul, en el Centro de Eventos Valle del Pacífico.
Durante la COP 16, Cali también tendrá una cumbre de alcaldes. ¿De qué se trata?
La “Cumbre de Cali: Diálogos de Ciudades y Regiones por la Biodiversidad” busca resaltar el papel de los gobiernos subnacionales en la protección de la biodiversidad y promover políticas efectivas, desde lo local, para su conservación. Pero a ésta se suma el octavo Summit de Gobiernos Subnacionales y Ciudades, en el que se explorarán soluciones innovadoras y mecanismos de financiamiento, desde cada nación, para cerrar la brecha económica frente a la biodiversidad.
En segundo lugar, presentaremos los avances particulares logrados en la implementación del Marco Global de Biodiversidad y del Plan de Acción de la Convención sobre la Diversidad Biológica (CDB). Además se lanzará la "Coalición global de ciudades contra las economías ilegales que afectan al medio ambiente”, que es la unión de un grupo de urbes, que lideramos desde Cali, para abordar desafíos comunes frente a negocios ilegales y su impacto en la conservación de la biodiversidad.
¿Cuál será la primera tarea de la coalición?
Firmaremos una Declaración de Compromiso de Protección del Chocó Biogeográfico, con Panamá, Costa Rica y Ecuador, que busca combatir economías criminales como la minería ilegal y la deforestación, y promover la conservación de la biodiversidad y el desarrollo sostenible.
‘Buscamos que la cumbre deje un legado de trabajo conjunto’
La organización de la cumbre global de Cali tiene otra protagonista importante, no solo por los recursos que puso sino por el papel articulador que jugó entre las distintos niveles de gobierno y con el sector privado. Es la Gobernación del Valle del Cauca, que desde enero está por segunda vez en manos de Dilian Francisca Toro.
La mandataria vallecaucana considera que este evento internacional generará un impacto positivo en el desarrollo de la región, la cultura del cuidado del medio ambiente, la economía verde y la sostenibilidad.
periodista externo ace