El dólar comenzó el último día de la semana a la baja, mientras la atención de los operadores se centra en los datos económicos de Estados Unidos que se publicarán la próxima semana, incluido el informe mensual de nóminas, en busca de nuevas pistas sobre el alcance de los recortes de las tasas de interés de la Reserva Federal.
La divisa abrió el viernes al alza en $4.290, ubicándose $21,83 abajo de la Tasa Representativa del Mercado, que estaba en $4.311,83. La moneda norteamericana tocó un precio máximo de $4.290, mientras que el mínimo fue de $4.281,01. Se registraron cuatro transacciones por un monto de US$1 millones.
Según Bloomberg, con la proximidad de las elecciones presidenciales del 5 de noviembre, algunos analistas predicen un impulso al mercado de valores si gana Donald Trump, mientras que otros advierten que podría reavivar la inflación y desacelerar el ritmo de flexibilización de la Fed.
“Al menos los mercados están intuyendo una victoria arrasadora de los republicanos, y quizás una victoria aplastante en las elecciones y en el Senado”, escribió en una nota Stephen Auth, director de inversiones de renta variable de Federated Hermes.
Además, señaló que, “si esto ocurriera, y creemos que podría ocurrir, esperaríamos que el modesto repunte que hemos experimentado desde julio cobrara impulso. Una victoria de Trump probablemente favorecería a las acciones de la vieja economía financiera, industrial, energética y de pequeña capitalización”.
Los estrategas de Bank of America, encabezados por Michael Hartnett, destacaron otras operaciones previas a las elecciones. Los inversionistas siguen acumulando oro como cobertura contra la inflación y el populismo, mientras que otros temas populares, como la venta de bonos y la compra de acciones de inteligencia artificial, se mantienen, dijeron.
Según Reuters, los precios del petróleo cotizaban con pocos cambios el viernes, pero se encaminaban a anotar un alza semanal de alrededor de 2%, ya que los comerciantes se mantenían en vilo por las tensiones latentes en Oriente Medio antes de la reanudación prevista en las conversaciones de alto el fuego en Gaza en los próximos días.
Ambos referenciales han fluctuado esta semana, subiendo el lunes y el martes antes de caer el miércoles y el jueves, en gran medida por las expectativas de que aumente o disminuya el riesgo en Oriente Medio.
“La incertidumbre hace que los inversionistas sean comprensible y justificadamente pragmáticos”, dijo John Evans, analista de PVM.
Por otro lado, los inversionistas siguen a la espera de la respuesta de Israel a un ataque con misiles por parte de Irán el 1 de octubre, que podría implicar ataques a la infraestructura petrolera de Teherán.
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