Más allá de la simple pereza, este hábito cotidiano puede revelar aspectos profundos de la psicología. La acumulación de vajilla sucia no es solo un descuido, sino que puede ser una manifestación de incluso emociones.
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Según expertos, son varias las razones que encierran que esta actividad cotidiana no se haga con juicio:
- Dejar los platos sucios puede ser una forma de postergar una tarea desagradable. Esto puede estar relacionado con problemas de gestión del tiempo, perfeccionismo o simplemente falta de motivación.
- Un fregadero lleno puede ser un recordatorio constante de las tareas pendientes, lo que puede creas estrés y ansiedad, según la teoría de la carga cognitiva.
- En ocasiones, el desorden puede ser una forma de expresar emociones reprimidas, como la ira o la frustración.
Además, hay otra teoría, pues dejar los platos sucios hace que se tenga un impacto negativo en las finanzas, de acuerdo a un economista español.
¿Cuánto tiempo pueden permanecer sucios los platos?
La rapidez con la que lava los platos es crucial para mantener una cocina higiénica. Si bien no hay un tiempo exacto, lo ideal es lavarlos lo antes posible, pues que estén más de 24 horas es perjudicial.
¿Por qué es importante lavar los platos rápidamente?
- Proliferación de bacterias: los restos de comida crean un ambiente perfecto para que las bacterias se multipliquen rápidamente. Bacterias como E. coli y salmonela pueden causar enfermedades si contaminan otros alimentos o utensilios.
- Olores desagradables: la comida descompuesta crea malos olores que pueden impregnarse en otros objetos de la cocina.
- Atracción de plagas: los platos sucios pueden atraer insectos y otros pequeños animales.
¿Cuál es la forma más higiénica de lavar los platos?
Pasos para lavar los platos de manera higiénica:
- Elimine los restos de comida: antes de lavar los platos, retire los restos de comida con un papel toalla o un raspador. Esto evitará que los alimentos se sequen y se adhieran al plato, dificultando su limpieza.
- Utilice agua caliente: el agua caliente es más efectiva para eliminar la grasa y las bacterias.
- Emplee un buen detergente: El detergente para lavar platos, contiene agentes que descomponen la grasa y eliminan las bacterias. Asegúrese de seguir las instrucciones del fabricante.
- Lave los platos en el orden correcto: comience por los vasos y cubiertos, luego los platos y, finalmente, las ollas y sartenes. Esto evitará que los residuos de comida más sucios contaminen los utensilios limpios.
- Enjuague bien: asegúrese de enjuagar cada plato con abundante agua caliente para eliminar todo el jabón y los restos de comida.
- Seque los platos inmediatamente: una vez secos, los platos estarán listos para guardar. Puede secarlos con un paño limpio o dejarlos escurrir.