Marlen Fernanda Mozo, de 19 años, fue asesinada en la zona urbana de Bosconia, en el departamento del Cesar, cuando se encontraba laborando en un puesto de SuperGIROS, al parecer, por integrantes del Clan del Golfo. El asesinato ocurrió este lunes festivo 4 de noviembre y quedó registrado en una cámara de seguridad que está siendo analizada por los investigadores judiciales que asumieron el caso.Tras este acto sicarial, en el departamento del Atlántico, se conoció que la Policía departamental se encuentra al frente de las investigaciones correspondientes porque en esa zona del Caribe también hay graves amenazas de este grupo ilegal contra los empleados de la compañía.El coronel Jhon Harvey Peña Riveros, comandante del Departamento de Policía Atlántico, en medio de una rueda de prensa, sostuvo que todo el equipo de investigadores se encuentra al frente de las pesquisas para evitar cualquier situación lamentable.“El día jueves 31 de octubre tuvimos una situación en Luruaco y en la zona rural de este municipio, salimos de manera inmediata junto con las autoridades, inclusive, el señor alcalde del municipio estuvo con nosotros. Estuvimos evaluando las circunstancias de esta amenaza que, simultáneamente, se habían presentado en otros puntos de SuperGIROS. Tomamos contacto también con el jefe de seguridad de esta empresa para poder darle tranquilidad a nuestro municipio”, explicó.De igual manera, detalló que hubo una reunión con las personas encargadas de vigilar estos puntos para que estén atentas a cualquier situación sospechosa que se pudiera llegar a registrar.“El día de hoy también estamos haciendo un acompañamiento desde las primeras horas de la mañana para darle un parte de tranquilidad a la empresa. Como tal, efectivamente, sí hay unas amenazas ahí que se están viralizando a nivel no solo del departamento, sino de toda la región Caribe”, agregó.Al mismo tiempo, dio a conocer que desde la Región 8 de la Policía Nacional dieron la orden de realizar una mesa operacional con el fin de evitar este tipo de situación, como la que se registró en Cesar, pero también como lo que sucedió en Luruaco, donde hombres armados obligaron a cerrar estos establecimientos.“Tras esta amenaza, [desde] la parte interna de la misma empresa procedieron todo mundo a cerrar, y nosotros activamos también a nuestro equipo de trabajo porque siempre hemos hecho un trabajo armónico y de colaboración con la Policía Metropolitana de Barranquilla, porque ellos también tuvieron esa afectación; entonces, precisamente, sobre esa misma línea empezamos a activar la ruta del departamento de manera judicial”, expresó.El alto oficial indicó: “De acuerdo con las labores que se han desarrollado, lastimosamente se presentó también un hecho lamentable en otra jurisdicción del otro departamento, pero que en la mesa judicial vamos a empezar a trabajar para determinar si es la misma amenaza o una misma estructura. Lo que buscamos es poder tener una estrategia clara con nuestro Gaula de la Policía Nacional y poder trabajar todos unidos”.Desde la Policía del Atlántico hacen un llamado a la ciudadanía en general para que puedan denunciar cualquier tipo de situación que se pueda llegar a registrar, tanto en los municipios del Atlántico como en las diferentes localidades de Barranquilla. Las líneas habilitadas son el 123 y el 165 del Gaula de la Policía, en la que se recibirá ayuda en caso de alguna emergencia.