Un nuevo atentado contra la fuerza pública se registró en las últimas horas en la subregión del Catatumbo. Dos soldados han sido asesinados en menos de 24 horas. Las autoridades están en máxima alerta. En la mañana de este miércoles, 6 de noviembre, soldados del Batallón Energético y Vial No.° 10, que se encuentran en la base militar de Chapinero, fueron atacados por un francotirador del ELN en el municipio de El Carmen, Norte de Santander.En esta acción criminal resultó asesinado el soldado Jean Carlos Giraldo Montes, quien habría quedado gravemente herido, y pese a los esfuerzos de los enfermeros de combate murió en el lugar de los hechos.“Hemos dispuesto un equipo interdisciplinario para brindar atención y acompañamiento a sus seres queridos en este difícil momento. Las operaciones en contra de este grupo armado organizado continúan en la zona para contrarrestar estas acciones terroristas y preservar la seguridad de las comunidades del departamento de Norte de Santander”, detalló el Ejército en un comunicado.“Plan pistola” en el CatatumboEn la mañana de martes, 5 de noviembre, durante el desarrollo de operaciones militares en el área rural del municipio de El Carmen, Norte de Santander, fue asesinado el soldado profesional Jorge Torres Sierra, integrante del Batallón de Despliegue Rápido N.º 8, quien se encontraba cumpliendo su misión de proteger a la comunidad en esta región del país.Según la información de las autoridades sobre este reciente atentado contra la fuerza pública, se ha conocido que el militar, identificado como Torres Sierra, estaba cumpliendo con su turno de centinela cuando ocurrió el ataque.Ante esto, los compañeros del soldado se percataron de lo sucedido al llegar para relevarlo en su puesto, encontrando su cuerpo sin vida y con impactos de bala, aparentemente disparados con una pistola. Las circunstancias del ataque están siendo investigadas para esclarecer los detalles de lo sucedido.“Luego de esta acción criminal, se activaron todos los protocolos para verificar la situación que precedió a este lamentable hecho. De acuerdo a las primeras investigaciones, se trataría del denominado «plan pistola» contra nuestras unidades”, indicaron desde el Ejército.Fuentes oficiales del Ejército han confirmado que, hasta la fecha, siete militares han perdido la vida en el departamento de Norte de Santander durante este año, en su mayoría como resultado de acciones criminales atribuibles a la guerrilla del Ejército de Liberación Nacional (ELN).Este incremento en los atentados contra la fuerza pública coincide con un contexto de creciente violencia en la región, particularmente desde que el gobierno decidiera no renovar el cese al fuego con el ELN, cuyo acuerdo expiró el pasado 3 de agosto.El militar asesinado recientemente en este ataque fue descrito por una fuente militar como un “hombre experimentado”, lo que subraya la pérdida significativa para las fuerzas armadas en un momento crítico. Este oficial, que contaba con años de servicio en el Ejército, representaba una de las tantas víctimas de una serie de enfrentamientos que han escalado desde que se suspendieron los diálogos de paz y el cese al fuego con el grupo armado.La decisión del gobierno de no prorrogar el cese al fuego ha tenido un impacto directo en la situación de seguridad, especialmente en Norte de Santander, donde el ELN ha intensificado sus acciones violentas en contra de las fuerzas de seguridad.Este incremento de ataques ha causado no solo la muerte de militares, sino también un aumento en los enfrentamientos en áreas rurales y zonas estratégicas del departamento, donde el ELN tiene una presencia histórica y activa. La respuesta de la guerrilla ha sido rápida y feroz, con emboscadas, atentados y ataques armados dirigidos tanto contra unidades militares como contra policías y otros miembros de las fuerzas del orden.