En una tarde cargada de emociones, la Selección Bolivia y Paraguay se enfrentaron este martes 19 de noviembre en un intenso partido por la jornada 12 de las Eliminatorias Sudamericanas. El Estadio Hernando Siles de La Paz fue testigo de un espectáculo que combinó fútbol de alto nivel, polémicas arbitrales y una tensión que culminó en incidentes entre los jugadores.
El marcador se abrió temprano, en el minuto 16, gracias a Ervin Vaca, quien conectó un potente remate de pierna izquierda desde el lado izquierdo del área. El gol llegó tras un pase en profundidad de Ramiro Vaca, que dejó sin opciones a la defensa paraguaya. Sin embargo, el tanto no estuvo exento de polémica, ya que fue validado tras una revisión del VAR que confirmó la legalidad de la jugada.
A partir de ese momento, Bolivia mostró confianza en su juego, controlando el balón y aprovechando la ventaja que les da la altitud, mientras que Paraguay buscaba espacios para generar peligro con contragolpes liderados por Miguel Almirón y Julio Enciso.
El segundo tiempo trajo consigo un cambio de dinámica. Paraguay comenzó a inclinar el campo a su favor, y en el minuto 70 encontró el premio a su insistencia. Miguel Almirón igualó el marcador con un preciso remate de zurda desde el centro del área tras una asistencia de Julio Enciso. El gol revitalizó a los dirigidos por Daniel Garnero, que empezaron a buscar el triunfo con mayor intensidad.
Sin embargo, Bolivia respondió con ímpetu, y en el minuto 80 se encontró con una oportunidad dorada: un penalti concedido tras la intervención del VAR por una falta dentro del área. La tensión en el estadio aumentó mientras los jugadores de ambos equipos forcejeaban en el campo.
Cuando Miguel Terceros convirtió el penalti en el minuto 82, desatando la euforia boliviana, el ambiente se tornó caótico. Mientras el joven anotador celebraba con la hinchada y los suplentes, en el terreno de juego estallaron los empujones, insultos y hasta balonazos entre jugadores de ambos equipos. El árbitro central se vio obligado a detener el partido y, tras varios minutos de confusión, expulsó a Diego Gómez de Paraguay por su participación en la trifulca.
A pesar de quedarse con diez hombres, Paraguay no bajó los brazos. En tiempo de adición, Julio Enciso emergió como el héroe de la noche al marcar el gol del empate definitivo. Con un disparo preciso, Enciso silenció el estadio y selló el 2-2 en un duelo que dejó emociones encontradas para ambas selecciones.