Entre enero y noviembre el índice de inflación se ubicó en 4,72%, dato que a juicio del presidente Gustavo Petro sería un indicio de que al cierre de este 2024, el IPC esté por debajo del 5%.
Y es que las cifras del costo de vida divulgadas el viernes por el Dane se constituyen en un insumo crucial para las conversaciones tripartitas de Gobierno, empresarios y trabajadores de cara a concertar el ajuste del salario mínimo para el año que viene.
Según la entidad oficial, el IPC anualizado a noviembre se ubicó en 5,2% y el último dato anual inferior a este se reportó en octubre de 2021, cuando fue de 4,58%. Pero el augurio de Petro, de una inflación menor a 5%, parece no estar en las cuentas de los analistas económicos consultados por el Banco de la República y Fedesarrollo para sus encuestas mensuales, quienes apuntan a que la inflación total para este año sea de 5,12% y 5,14%, respectivamente.
En un contexto de 5,1% de inflación y de una Productividad Total de los Factores (PTF) de 1,73, un eventual ajuste porcentual del mínimo sería de 6,8%, es decir un dígito, algo lejano del 10,10% aplicado para 2022, o del 16% fijado para 2023 o del 12,1% que se estableció para este año.
En plata, la remuneración mínima que actualmente es de $1,3 millones observaría un incremento de $88.400 y alcanzaría el próximo año $1.388.400.
Otras cifras, aportadas por el Dane son las de productividad laboral por hora trabajada y productividad media de trabajo que están por encima de 3, cuya posible inclusión en las conversaciones para fijar el salario mínimo serían un poco más beneficiosas para los 3,7 millones de colombianos que reciben este pago.
Es decir, si al proyectado IPC de 5,1% se agregan tres unidades, el alza sería de 8,1%, con lo que el incremento sumaría $105.300 y en consecuencia el mínimo para 2025 alcanzaría $1.405.300.
Es así como hoy, 9 de diciembre, cuando se reúnan la Comisión de Concertación Salarial, el Banco de la República y el Ministerio de Hacienda, los datos de inflación conocidos el fin de semana y otras cifras macroeconómicas harán parte de los insumos importantes para esa discusión, que procura mantener el poder adquisitivo de los trabajadores.
Vale anotar que las cifras de productividad presentadas por el Dane han sido criticadas por empresarios y académicos, por lo que la directora de la entidad, Piedad Urdinola, ha salido en defensa de los resultados y la metodología empleada para obtenerlos.
Por su parte, la ministra del Trabajo, Gloria Inés Ramírez, resaltó que “aunque en la subcomisión de productividad no llegamos a un acuerdo sobre la cifra de productividad para llevar a la mesa de concertación de este lunes, todas las partes aprobaron la metodología presentada por el Centro de Estadística”.
El miércoles se espera que trabajadores oficialicen la cifra que esperan obtener, y los empresarios el porcentaje que están dispuestos a ofrecer.