Atlético Nacional no pudo celebrar el título de Copa Betplay con su gente. Los aficionados que vieron el partido de vuelta por televisión, se quedaron a la espera de que mostraran la imagen típica del plantel levantando el trofeo en la cancha del Pascual Guerrero. El intento de invasión de los hinchas del América al terreno cuando iban 84 minutos del encuentro, llevó a que el partido fuera suspendido. El árbitro no pitó el final. En teoría, el encuentro no acabó.
Luego se supo que en la parte baja del escenario caleño el colegiado manifestó que el duelo no se podía reanudar por falta de garantías: sí hubo un final, pero los hinchas no lo vieron. Mientras eso pasaba en la capital del Valle del Cauca, en Medellín los aficionados celebraron con euforia. Afuera del Obelisco hubo gente tirándole espuma a los carros, gritando cánticos como “palo, palo, palo bonito, palo eh, eh, eh, eh, somos campeones otra vez”, mientras saltaban.
La fiesta duró un par de horas. Hubo mucha felicidad en la ciudad. Hasta altas horas de la noche se escucharon carros pitando, voladores de pólvora estallando, el pregón verde sonando una y otra vez.
La emoción no solo fue porque el cuadro verde llegó al título 34 de su historia. Se ratificó como el máximo ganador de la Copa Betplay en la historia con siete títulos. Y porque aseguró, mínimo, la clasificación a la Copa Sudamericana en 2025.
Pero el verdadero motivo de la alegría verdolaga fue vencer a su rival histórico en su casa. Aunque hubo una sensación de extrañeza entre los hinchas paisas por solo haber visto, muy tarde, unas fotos de los jugadores en los camerinos con el trofeo y algunos videos en redes sociales de los futbolistas como celebración.
Las malas condiciones de seguridad que se vivieron en el barrio San Fernando de Cali llevaron a que el trayecto del cuadro verde hasta el aeropuerto fuera más demorado de lo normal. Llegaron durante la madrugada a Medellín.
En pleno diciembre, no hubo un recibimiento ruidoso. Tampoco caravanas de hinchas detrás del bus verde. Los administrativos del Rey de Copas no organizaron nada en la Plaza de Banderas, donde festejan los títulos cuando ganan como visitantes (así pasó cuando consiguieron la Liga del 2022-1 en Ibagué). El anhelo del equipo de compartir con su gente quedó pospuesto.
No solo la mala situación de seguridad que se vivió en Cali privó a los verdolagas del festejo con su afición. También el calendario apretado que tiene por delante. Tres días después de quedar campeón de la Copa, los dirigidos por Efraín Juárez disputarán el juego de ida de la final de Liga ante Tolima en el estadio Murillo Toro de Ibagué.
Este miércoles, Nacional ajustará su partido número 14 en los últimos 44 días. El cuadro verde ha disputado, en promedio, un encuentro cada 3 días desde el 4 de noviembre, cuando enfrentó a Santa Fe en el duelo válido por la fecha 16 de la fase todos contra todos de la Liga.
De los 13 encuentros que disputó en ese tiempo hasta el momento, los antioqueños ganaron cuatro (5-0 y 3-0 ante Santa Fe, 0-1 y 2-1 contra Pasto, 3-1 ante América); empataron cinco (1-1 contra Santa Fe, 1-1 con Pereira, 1-1 con DIM, 1-1 con Millonarios, 0-0 con América) y perdió tres (1-0 ante Tolima, 1-0 con el DIM y 2-1 contra Millonarios en Bogotá).
“Nos ha costado mucho llegar hasta donde estamos. Hemos tenido que trasnochar mucho, hemos pasado horas recibiendo masajes por tantos partidos seguidos, pero estamos felices de haber logrado el título de Copa, de haberla levantado. Somos conscientes de que el miércoles tenemos otra final contra Tolima y nos prepararemos para afrontarla”, manifestó el arquero Harlem “Chipi Chipi” Castillo cuando llegaron al aeropuerto en Medellín.
Durante el lunes, el plantel del cuadro verde hizo ejercicios de movilidad en el hotel de concentración en la mañana, y luego los jugadores tuvieron tiempo libre para descansar, luego del desgaste físico y emocional que vivieron en el Valle del Cauca.
En la mañana de este martes, los dirigidos por Juárez entrenarán en la sede de Guarne. En la tarde viajarán a la capital del Tolima, donde Efraín Juárez y el defensa central William Tesillo atenderán a los medios de comunicación en la rueda de prensa oficial que organiza la Dimayor.
En la capital musical de Colombia, el cuadro verde buscará conseguir un buen resultado que le permita llegar al juego de vuelta del domingo en el Atanasio Girardot con comodidad para darle a sus aficionados la oportunidad de celebrar los dos títulos.
Por lo menos así lo esperan aficionados como Óscar Torres, quien manifestó que cree que lo mejor que puede pasar es dar la vuelta con la Copa y la Liga el domingo. “No pudimos hacerlo después del partido en Cali, pero seguro podremos celebrar los dos títulos en casa”.
Sin embargo, a Nacional le cuesta ganar en Ibagué. La última victoria del cuadro verde en Tolima se remonta al 7 de junio del 2018, cuando se disputó la final de ida del torneo apertura de ese año. Ese día, la escuadra antioqueña se impuso con un gol de Dayro Moreno al minuto 57, con pase de Reinaldo Lenis.
Después de eso, el Rey de Copas visitó el Manuel Murillo Toro en ocho oportunidades. De ellas, perdió seis y empató en dos. Las igualdades fueron recientes: 2-2 en el torneo clausura del 2022 y el mismo resultado en el apertura del año pasado (2023).
La visita más reciente del equipo más ganador de Ligas en la historia (tiene 17 títulos), a Ibagué fue el pasado 14 de noviembre, en duelo válido por la fecha 19 de la primera parte del torneo. Ese día los dirigidos por el antioqueño David González se impusieron 1-0 con gol de Brayan Gil. Esos antecedentes hacen pensar que el duelo que veremos el miércoles en la ida será disputado, parejo, y seguro los dirigidos por Juárez tomarán precauciones en la parte de atrás, para luego hacer transiciones veloces.
A la final de ida de la Liga, el plantel del Tolima llegará con 10 días de descanso. El último encuentro que disputó el cuadro pijao se remonta al 8 de diciembre. Ese día, los tolimenses vencieron 1-0 al Once Caldas en el último duelo del Grupo B de los cuadrangulares y aseguraron el paso a la final.
Los de Ibagué sumaron 10 puntos en semifinales. Anotaron siete goles y recibieron la misma cantidad. Además, se ratificaron como el equipo con mayor regularidad del año en la liga colombiana.
Tolima es primero de la reclasificación con 92 puntos. Entre el final del “todos contra todos”, donde fue cuarto con 34, y el cierre de los cuadrangulares, sumo las unidades que le permitieron superar a Independiente Santa Fe, que durante casi todo el año lideró la tabla de regularidad en el balompié criollo y terminó segundo con 91.
Eso habla bien del proceso que ha llevado el técnico David González. El entrenador paisa, que asumió su cargo en el segundo semestre del 2023, logró que Tolima fuera un equipo equilibrado. En la fase regular anotó 25 goles y solo encajó 12.
Nacional, solo por hacer un comparativo, recibió 20 anotaciones en la fase regular. Eso se debe a que, aunque es muy bueno atacando (suma 40 goles en Liga), también se ha tenido momentos durante el semestre en que no ha mostrado seguridad en defensa.
Eso cambió en los últimos juegos que disputó. En cuadrangulares solo le anotaron cuatro veces. Durante las finales de la Copa Betplay únicamente le hicieron un gol. No obstante, los verdes sufrieron pasajes de los partidos contra equipos que lo contraatacaron como Millonarios, o que salieron a proponerle un juego de “tú a tú”, como América.
Los resultados lo han acompañado. Sin embargo, la falta de propuesta durante algunos minutos es algo que el técnico Juárez debe corregir. Más contra equipos como Tolima, que se repliegan bien, hacen transiciones rápidas y tienen jugadores certeros adelante como Brayan Gil, tercer goleador de la Liga con 8 dianas. De lograr controlar esos aspectos, el Atanasio será una fiesta el domingo.
Atlético Nacional busca su décimo octavo título de Liga. Deportes Tolima, por su parte, quiere bordar su cuarta estrella en el escudo. La última vez que los verdes consiguieron un campeonato liguero, fue frente al cuadro tolimense en el apertura del 2022, cuando eran dirigidos por el entrenador antioqueño Hernán Darío “El Arriero” Herrera.
Aquella vez, los verdes se sacaron la “espinita” de haber perdido, en su casa, el título del primer semestre del 2018 con el cuadro tolimense, entonces dirigido por Alberto Gamero (hoy en Millonarios). La del clausura de este año será la tercera oportunidad en la que estos dos equipos se enfrenten por un título en el fútbol colombiano. El ganador, desempatará el historial de títulos ganados ante el rival.