Llegar a clases es, para los niños de La Guajira, igual de retador e importante que el Tour de Francia para Rigoberto Urán o Esteban Chaves. La diferencia es que los niños no van en bicicleta ni cruzan altas montañas como los Alpes o Pirineos; su trayecto para lograr estudiar es llano con desniveles, trochas, zonas áridas cubiertas por un manto de sol, o zonas lodosas con las lluvias. Es una carrera contrarreloj de una o dos horas diarias a pie, en la que muchos pequeños, incluso, desertan por lo exhaustivo que resulta. Al final, lo que hace parecidas a estas dos competencias es que en ambas entregan todo por cumplir sus sueños y alcanzar la meta.
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En las zonas rurales de Colombia, más del 30 por ciento de los niños recorren un promedio de 5 kilómetros diarios para llegar a la escuela, es decir, casi una maratón a la semana solo para asistir a clases. Así lo indicó ScotiaGBS, el centro de servicios de negocios globales de Scotiabank, donde además señalaron que el resultado de esta situación se ve reflejado en las cifras de deserción escolar: del 6,8 por ciento en primaria y 17 por ciento en secundaria.
Ante este panorama y con el objetivo de dejar una huella en la vida de las niñas y niños de Colombia, ScotiaGBS, en alianza con la Fundación World Bicycle Relief, llegó hasta las zonas más vulnerables de La Guajira, Barranquilla y Antioquia para donar más de 1.000 bicicletas a niños de escuelas públicas, que cambiaron kilómetros de extenuantes caminatas por pedalazos de oportunidades.
Es impactante cómo de manera tan eficaz, facilitar la movilidad permite que los niños no abandonen la escuela.
“Esta entrega de bicicletas demuestra un profundo respeto por la comunidad y su bienestar, además de un compromiso con la responsabilidad social al contribuir de esta forma con impulsar la educación y el desarrollo. Esta iniciativa también refleja nuestro compromiso de dejar una huella positiva y duradera en la vida de las niñas y niños, promoviendo una cultura de solidaridad y apoyo”, comentó Alcides Vargas, Vicepresidente Senior y Gerente General de ScotiaGBS.
Una de las escuelas beneficiadas con la entrega fue la Institución n.° 7 de Maicao, en La Guajira, donde 200 niños y sus familias recibieron esta herramienta con la que no solo pueden transportarse, sino que pueden cambiar sus vidas al acortar distancias, aumentar sus oportunidades y tener más acceso a lo que realmente necesitan.
“Recibir las bicicletas significó un momento de mucha alegría y esperanza. Por fin tuvimos la bendición de ser favorecidos. Son niños que deben caminar hasta dos horas para llegar a la escuela, bajo condiciones complejas porque deben atravesar las rancherías donde, por lo general, son terrenos de trocha, áridos; si hace sol, deben aguantar altas temperaturas; si llueve, sus zapatos llegan llenos de barro. Esto, sin duda, es una barrera al acceso a la educación, porque los niños llegan cansados y se desaniman con la falta de un medio de transporte”, explicó Lucas Fernando Rodríguez, rector de la institución.
Precisamente, uno de los casos que más impactó a Lucas como rector, fue el de una pequeña que había desistido de seguir estudiando, debido a los largos desplazamientos que requería para llegar a la escuela.
“Hubo una situación muy particular que me conmovió mucho, y es el caso de una niña que había dejado de asistir al colegio por las dificultades que esto representaba. Hablamos con su familia y nos acercamos a ella para intentar motivarla a seguir estudiando, pero al no tener una alternativa de transporte, era casi que imposible que regresara. Es impactante cómo de manera tan eficaz, facilitar la movilidad permite que los niños no abandonen la escuela”, relató el rector.
En efecto, el pasado 26 septiembre, en un evento especial, ScotiaGBS junto a World Bicycle Relief, arribaron a las instalaciones de la institución educativa n.° 7 en Maicao, La Guajira, para entregar una bicicleta y elementos de protección personal a cada estudiante, junto con capacitación en el uso y mantenimiento de las bicicletas y la gestión sostenible del proyecto. Gracias a esto, la pequeña del relato de Lucas regresó a la escuela con ganas de pedalear para cumplir sus sueños.
La bicicleta les ayuda no solo a la salud física, sino también mental y hasta emocional porque de camino al colegio pueden admirar la belleza de los paisajes que nos regala la ruralidad.
“Nos complace colaborar con ScotiaGBS, del grupo Scotiabank, en esta iniciativa para nuestros programas en Atlántico, La Guajira y Antioquia. La distribución de estas bicicletas no solo permitirá que los niños y niñas lleguen más rápido y de manera más independiente a la escuela, sino que también les proporcionará una herramienta para mejorar su calidad de vida y la de sus familias”, comentó Andrew Wright, Director de World Bicycle Relief Colombia.
Esta donación se suma a las otras 750 bicicletas entregadas en comunidades rurales de Barranquilla y Antioquia, donde las largas distancias también son una barrera para acceder a la educación, trabajo y servicios esenciales, y donde la bicicleta se convierte en un vehículo generador de oportunidades.
En Concepción, Antioquia, algunos de los estudiantes recorren hasta dos horas para llegar a clases. ScotiaGBS ScotiaGBS y World Bicycle Relief llegaron a la institución educativa n.° 7 en Maicao, La Guajira. ScotiaGBS Las bicicletas Buffalo son diseñadas por World Bicycle Relief para superar terrenos difíciles. ScotiaGBSUna nueva motivación para estudiar
En un imán de niños se convirtió la ventanita de uno de los salones de la Institución Educativa Presbítero Libardo Aguirre, en Concepción, Antioquia, donde parecía alojarse una pequeña exhibición de caballitos de acero nuevos, listos para ser entregados. La emoción de los pequeños, imaginándose montar aquellas carrocerías, es tal, que aún sin haber campo para un rostro más, cada niño se las arregla para abrirse paso y en puntapiés asomarse a la ventanita y así sumarse a la apreciación de las lujosas bicicletas.
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En el marco del Giro de Rigo, y como parte de una apuesta por impactar y beneficiar a las instituciones educativas por donde atraviesa esta competencia, el pasado 1 de noviembre ScotiaGBS arribó a las zonas rurales de Antioquia para llevar pedalazos que hoy son fuente de motivación educativa para los niños.
“De camino al salón vi un tumulto de niños pegados a la ventana. Me asomé para ver que estaba sucediendo y, claro, cómo no emocionarse si allí estaban guardadas 55 bicicletas que les entregarían a los estudiantes. Me sumé a la emoción de los niños, quienes entre chiste y chanza corrían a preguntarme si una de aquellas bicis era para ellos”, relató Juan Fernando Peña Lopera, docente de matemáticas de la institución educativa.
Si por ellos fuera, hasta dormirían en las bicis. Están tan emocionados y motivados con estas que, incluso, los descansos se convirtieron en práctica, pues no paran de dar vueltas pedaleando.
Con estos vehículos, 50 niños de cuarto a décimo reemplazaron los caballos por caballitos de acero o los interminables recorridos de una o dos horas a pie por 45 minutos en bici, lo cual “les ayuda no solo a la salud física, sino también mental y hasta emocional porque de camino al colegio pueden admirar la belleza de los paisajes que nos regala la ruralidad”, destacó el docente.
Una situación similar vive en San Vicente de Ferrer, Antioquia, donde otros 50 niños ahora no quieren bajarse de la bicicleta que ScotiaGBS y la Fundación World Bicycle Relief les regalaron.
“Si por ellos fuera, hasta dormirían en las bicis. Están tan emocionados y motivados con estas que, incluso, los descansos se convirtieron en práctica, pues no paran de dar vueltas pedaleando; en seguida se baja un estudiante sigue el otro y así sucesivamente hasta que entre todos se la comparten. Si antes soñaban con ser Rigo, ahora se sienten más cerca de cumplir el sueño de estudiar para llegar a pedalear junto a él”, contó conmovida María Magnolia Díaz Jaramillo, quien en sus 25 años como rectora de la Institución Educativa Rural Chaparral, señala, nunca había visto tanta alegría en sus estudiantes.
Posterior a la entrega, el 3 de noviembre, los pequeños beneficiarios se abrocharon las rodilleras, casco y chaleco para llegar hasta Las Partidas, un paraje cercano a la institución educativa, y desde allí cumplir otro de su gran sueño: ver a Rigo, así fuera de lejos.
“Como si hubiera pasado el Dios del cielo, los niños gritaron emocionados cuando vieron al mismísimo Rigo pasar por allí en el Giro. Lo admiran tanto que esperan con ansias que se les haga el milagrito de que algún día llegue hasta la escuela y vea el empeño que le meten al estudio para llegar a ser igual de grandes que él”, destacó la rectora.
Desde el 2023, y hasta la fecha, ScotiaGBS ha transformado la educación de las zonas rurales de Colombia con la donación de más de 1.000 bicicletas Buffalo, diseñadas por World Bicycle Relief para superar terrenos difíciles, llevar cargas pesadas y recorrer largas distancias. Con estos vehículos, la compañía sigue apostando por impactar positivamente la vida de los niños al devolverles las ganas de creer en un futuro y entregándoles un motivo para seguir estudiando.
“Nos llena de entusiasmo esta alianza con la Fundación World Bicycle Relief con la que esperamos marcar una diferencia significativa en las vidas de los niños y niñas de La Guajira, Atlántico y Antioquia” expresó Alcides Vargas.
*MÁS CONTENIDO. Un proyecto de Contenidos Editoriales Especiales de EL TIEMPO con el auspicio de ScotiaGBS, del grupo Scotiabank.
Tatiana Ortiz Landecho - periodista externa ace