Lula da Silva, Claudia Sheinbaum y Diosdado Cabello respaldaron al mandatario colombiano. Caracas propuso, incluso, ser mediador "ante la crisis en este país".
El mandatario tenía planeado asistir al acto de reconocimiento por el genocidio político de la UP. También se habían convocado marchas en contra de la decisión de la UP.
El comunicado sigue la línea de la tesis de 'golpe de Estado' esgrimida por el primer mandatario y cuestionó el sentido de la decisión del tribunal electoral.
La Cancillería pidió medidas provisionales ante la Corte Interamericana de Derechos Humanos. Aseguran que el caso se asemeja al que vivió el mandatario como alcalde de Bogotá.
Tras la determinación en contra de Gustavo Petro, el antecedente más cercano ocurrió en 1996 en medio de la polémica por la entrada de dineros del narcotráfico al esfuerzo presidencial.
