Laura Charry

Ser un colegio de alta calidad no es fácil y menos si se tienen recursos limitados por el presupuesto público. No obstante, desde hace 50 años la institución educativa Alexander Von Humboldt de Barranquilla, no solo ha logrado posicionarse como una de las mejores del país (puesto 18 en el ranking de este año), sino que se ha consolidado como el mejor colegio oficial de Colombia, medido por sus puntajes promedio en el Pruebas Saber 11.

El Liceo Campo David es un colegio atípico. Es el único ubicado en el sur de Bogotá que compite “de tú a tú” con los más costosos del país por ocupar los primeros lugares en las pruebas de Estado y, sin ser bilingüe, lo ha logrado durante más de una década. Es atípico porque está en medio de una zona comercial de difícil acceso por el tráfico, pero al que cada año llegan cientos de familias ilusionadas con poder matricular allí a sus hijos (en 2024, lo intentaron 800, pese a que solo había 56 cupos).

La búsqueda de una fuente de ingresos fue el detonante que le dio vida hace 26 años al colegio ‘revelación’ del ranking de este año. Se trata del Monte Hebrón, de Bogotá, que logró saltar del puesto 24 en 2023 al segundo lugar en 2024. Su fundador y hasta hace poco rector, Ramiro Velásquez recuerda que poco tiempo después de casarse, él y su esposa tuvieron una quiebra económica y decidieron buscar qué ponerse a hacer.

La revolución comercial impulsada por el presidente Donald Trump, con el objetivo de “hacer a su país grande otra vez”, no solo ha puesto al mundo al borde de una guerra comercial sin precedentes, sino que ya ha dejado varias víctimas colaterales, entre ellas Colombia. La estrategia de Trump, presentada en su famoso “día de la liberación”, consiste en imponer a sus socios comerciales tarifas arancelarias equivalentes a las que estos aplican a las exportaciones estadounidenses.

Antonio está cercano a cumplir 80 años. Ha sido un trabajador disciplinado del campo, nunca le han faltado ofertas para coger café, cuidar ganado o fincas y aunque logró pensionarse con un salario mínimo de su último empleo -algo extraordinario en su contexto pues la mayoría de los trabajadores del campo son informales-, el dinero no le alcanza.A su cargo ya no solo están su esposa y un hijo enfermo, sino también tres nietos pequeños, así que con achaques y todo no deja de jornalear.

En medio de la incertidumbre global por la nueva política arancelaria estadounidense, la cual tiene en rojo a las principales bolsas mundiales, Colombia, que en términos relativos no resultó tan golpeada como otras naciones, está buscando la mejor manera de enfrentar el nuevo escenario comercial.Con este objetivo, en la Cancillería se reunieron este lunes, 7 de abril, los representantes de 13 gremios económicos con los ministros de Comercio, Agricultura, Energía y Relaciones Internacionales para evaluar caminos que le permitan al país explorar nuevos mercados y abrir más puertas a sus produ

No hay mal que por bien no venga. Ese refrán les cae como anillo al dedo a las multinacionales mineras, a los mineros artesanales –que buscan oro con bateas en los ríos–, a la Dian e incluso a los grupos criminales que extraen oro de manera ilegal. Todos pueden hoy agradecerle a la nueva política arancelaria de Donald Trump, que ubicó al precio del metal precioso en máximos históricos. Desde que era candidato y aspiraba a su segundo periodo presidencial, Trump habló de su intención de subir los aranceles que su país les cobra al ingreso de productos extranjeros.

Durante el discurso en el que llamó el “día de la liberación”, el presidente Donald Trump anunció que impondrá un arancel mínimo del 10 % para todos los países del mundo, del que no se escapa Colombia.Con esta medida busca “volver a Estados Unidos rico de nuevo”, pues argumenta que así podrá equiparar la cancha frente a muchos países que le cobran elevados aranceles al ingreso de productos americanos, mientras que Estados Unidos les cobra una tarifa inferior.

Los 2,7 millones de colombianos que hasta febrero pasado no habían podido conseguir trabajo son el reflejo de uno de los mayores problemas sociales que enfrenta el país y que lo ubican como el segundo de más alta desocupación de América Latina, solo superado por Venezuela.Las cifras del Dane muestran que el número de desempleados se redujo en 267.000 personas entre febrero de 2024 y el mismo mes de 2025. Esto implica una tasa de desempleo de 10,3 %, el nivel más bajo registrado para el segundo mes del año en una década.