Los cerros de Bogotá guardan historias fascinantes que han cautivado a bogotanos y visitantes durante mucho tiempo.
Los cerros orientales albergan una gran variedad de flora y fauna, muchas de ellas endémicas. Las vistas desde los cerros son simplemente espectaculares. Podrá apreciar la ciudad de Bogotá desde una perspectiva única, así como disfrutar de paisajes montañosos y valles.
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De acuerdo con la Secretaría Distrital de Ambiente, estos cerros son una barrera natural de la expansión humana hacia el este, y forman parte de un sistema montañoso que conecta a los Parques Nacionales Naturales como Chingaza.
Chingaza es uno de los páramos más importantes de Colombia. Es considerado la ‘fábrica de agua’ de Bogotá, pues sus lagunas y ríos abastecen a gran parte de la ciudad.
Detrás de los cerros también existe una historia de conservación y lucha por proteger el patrimonio. A lo largo de las décadas se han implementado políticas que buscan preservar su valor tanto natural como cultural.
¿Cuál es la altura de Bogotá?
La altura de Bogotá es uno de los aspectos más característicos de la ciudad. Bogotá se encuentra a una altitud promedio de 2.625 metros sobre el nivel del mar.
Esta considerable altura influye en varios aspectos de la vida en la ciudad, como:
- Clima: Bogotá disfruta de un clima templado durante la mayor parte del año, con temperaturas frescas y agradables. Sin embargo, las noches pueden ser bastante frías.
- Salud: la altura puede causar algunos efectos en los visitantes, como dificultad para respirar, mareos o fatiga. Es recomendable tomar las precauciones necesarias, especialmente si tienes alguna condición médica previa.
- Vegetación: la altura ha dado lugar a una vegetación única, con especies adaptadas a las condiciones de montaña.
¿Qué hay de bueno para hacer en Bogotá?
- Explorar el centro histórico de La Candelaria, que en octubre se aprovecha del ‘tour’ fantasma en el corazón de Bogotá, con calles empedradas, casas coloniales y un ambiente lleno de historia.
- Subir al cerro de Monserrate: ascienda en funicular o teleférico y disfruta de vistas panorámicas de la ciudad.
- Visitar el Jardín Botánico: un oasis en medio de la ciudad, perfecto para relajarse y aprender sobre la flora colombiana.