Entre Norte de Santander y Medellín hay 579 kilómetros de distancia, lo que implica que para ir entre los dos lugares un carro se gasta cerca de 14 horas continuas rodando a buena velocidad. Y no obstante esta lejanía, las consecuencias de la crisis humanitaria que se vive en El Catatumbo, la zona localizada en el departamento fronterizo por el enfrentamiento entre el Eln y las disidencias de las Farc ya se sienten en la capital antioqueña.
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En la última semana han llegado a Medellín cuatro familias conformadas por 12 personas, según confirmó el secretario distrital de Paz y Derechos Humanos, Carlos Arcila. Los sitios de origen son el corregimiento de La Gabarra y otras rurales del municipio de Tibú.
Todas estas víctimas del conflicto armado están recibiendo atención humanitaria de emergencia, como lo ordena la Ley 1448 de 2011. Esta consiste en apoyo alimentario, albergue si lo necesitan y apoyo psicosocial, garantías que se deben prolongar durante tres meses o por seis si así lo requieren.
“Tres de estas familias están albergadas y una cuenta con red de apoyo familiar en la ciudad”, explicó Arcila.
Uno de los últimos informes sobre desplazamiento forzado elaborado por la Personería local, con corte a agosto de 2024, indica que el año pasado hasta esa fecha habían arribado a esta capital más de 5.000 personas víctimas de esta infracción a los derechos humanos.
Si bien históricamente el Chocó está en el primer lugar entre los lugares de origen de los desterrados que llegan acá, ahora la situación en la frontera nororiental del país ha encendido las alarmas de las autoridades locales, que se están preparando por la posibilidad de convertirse también en destino del éxodo que se está presentando.
Los grupos armados en El Catatumbo están enfrentados por el dominio territorial que les dé el manejo de las rentas criminales que se generan como producto de la extorsión y del cultivo y el tráfico de drogas.
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En las dos semanas que llevan las confrontaciones armadas entre el Frente de Guerra Oriental del Eln y el frente 33 de las disidencias irían más de 80 personas muertas y más de 42.000 desplazados.
Con el fin de solidarizarse con las familias que han tenido que abandonar los campos, la Alcaldía de Medellín emprendió una campaña que hasta este jueves había recogido más de media tonelada de alimentos y una cifra superior a los 160 millones de pesos.
Igualmente, este viernes el Grupo Éxito y su Fundación anuncian que donarán 400 kits de aseo para las familias desplazadas por el conflicto en el Catatumbo.
“Estos kits, que contienen elementos esenciales como pañales y pañitos húmedos, serán distribuidos en los municipios de Cúcuta y Ocaña a través de las alcaldías locales”, dijeron en un comunicado.
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En Medellín hay varios puntos de entrega de ayudas, a donde quienes se quieran solidarizar pueden acudir.