Los bancos centrales, tal vez las instituciones más serias y respetadas en el mundo, necesitan que la gente crea en ellos, y esa confianza es cada vez más importante conseguirla entre las nuevas generaciones. Por ese motivo, se han volcado a las redes para tratar de explicar sus políticas.Un informe de Bloomberg señala que el de Venezuela es el que más seguidores tiene en Instagram, con 1,9 millones; los expertos lo atribuyen a que a los usuarios de esa red les encanta el drama y eso es lo que pasa con la moneda en el vecino país. El segundo banco central más seguido es el de Indonesia, con un millón de seguidores. Paradójicamente, a la Reserva Federal de Estados Unidos, cuyas decisiones sacuden al mundo, solo la siguen 200.000 personas en Instagram. El Banco de la República de Colombia no clasifica en el top 10, pues tiene 79.600 seguidores.
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