El volcán Fuego, considerado el más peligroso y activo de toda la región de Centroamérica, presentó una erupción efusiva luego de que el pasado domingo se declara alerta naranja en horas de la noche. En el evento natural, una mezcla de material volcánico, gases y rocas descendieron por el barranco de las zonas aledañas: Las Lajas, El Jute, Seca y Ceniza en la madrugada del lunes.Ante lo ocurrido, las autoridades del territorio evacuaron a más de 1.000 personas este lunes 10 de marzo, que podrían estar en riesgo en las zonas de Sacatepéquez, Escuintla y Chimaltenango. “Como medida de prevención, unas 125 familias, 900 personas aproximadamente, han comenzado a ser evacuadas“, dijo a la prensa el vocero de la Coordinadora Nacional para la Reducción de Desastres (Conred), Juan Laureano.Este gran volcán, ubicado en el centro del Guatemala, se encuentra en “erupción masiva”, por lo que las autoridades locales de protección civil indicaron que se encuentran en alerta. En el transcurso de las horas, la erupción ha provocado cuatro correntadas de material volcánico que descienden por la montaña, y la ceniza volcánica registró una altura de hasta 7 mil metros sobre el nivel del mar.Debido a la emergencia, los colegios aledaños a la región tuvieron que suspender las clases y las actividades cotidianas de los ciudadanos fueron suspendidas mientras se controla la situación y se evacúa a la mayor cantidad de personas posibles. Testigos del evento han informado que la Ruta Nacional 14 está completamente cerrada, lo que provocó un fuerte tráfico en la vía.Las autoridades se adelantaron a recomendar a las personas que se mantengan informadas a través de las cuentas oficiales de la Conred y el Instituto Nacional de Sismología, Vulcanología, Meteorología e Hidrología de Guatemala (Insivumeh), evitar acercarse a la montaña o zonas cercanas y empacar una maleta de emergencia de 72 horas, que incluya comida, agua y medicina, para poder evacuar hasta que la emergencia sea controlada.Este volcán, que se encuentra a 35 km de la capital de Guatemala, había estado presentando cambios desde enero, lanzando columnas de gas, ceniza y rocas. El Insivumeh informó el domingo, cerca de las 9 de la noche, que el volcán presentó “un incremento considerable de la actividad efusiva”, donde había presencia de descensos de flujos piroclásticos.Estos flujos son “mezclas de gases, ceniza y bloques de roca a alta temperatura que descienden a gran velocidad por los flancos del volcán”, “se caracterizan por su extremo poder destructivo debido a sus altas temperaturas (hasta 600 °C), su alta velocidad de desplazamiento (hasta 500 km/h) y su alcance (entre 5 y 20 km de la cumbre del volcán)”, se agregó. Y se aclaró que “dada su velocidad y temperatura elevada, los flujos piroclásticos son fenómenos altamente letales”.Una erupción similar de este volcán en el 2018, provocó una avalancha de material caliente que dejó 215 fallecidos y casi la misma cantidad de personas desaparecidas.
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