La Asociación Médica de Antioquia (Asmedas) lanzó una alerta este jueves 5 de diciembre tras informar sobre el despido y la no renovación de contratos de varios trabajadores del Hospital Alma Máter de Antioquia, entre médicos generales, internistas, camilleros, auxiliares de piso y enfermeras auxiliares.
En una carta que Asmedas enviará al Consejo Superior Universitario (CSU) de la Universidad de Antioquia, denuncian que se trataría de la salida más de quince médicos generales, tres internistas y más de una decena de camilleros, auxiliares de piso y enfermeras auxiliares. “La Dirección Seccional de Salud de Antioquia ordenó reducir el número de camas en el hospital (70 camas menos), pero ello no justifica el número tan monstruoso de despedidos y de contratos laborales no renovados”, indicaron en la misiva, en la que también hacen el llamado al CSU a actuar en busca de soluciones que eviten una eventual quiebra del hospital, lo que terminaría en su privatización.
Le puede interesar: Líos con insumos y medicamentos obligaron a la Clínica León XIII de Medellín a cerrar 200 camas
El médico Carlos Oliveros, miembro de la junta directiva de la asociación, señaló que esta situación con el personal se da en medio de una caída importante de los servicios y la atención del hospital en los últimos dos años, en especial en este 2024, lo que considera que va en contravía del aumento de la demanda de servicios en la ciudad. “Estamos en la última etapa de lo que ha sucedido con muchas disminuciones en el hospital y es que termina ese desmantelamiento en una gran masacre laboral que afecta no solamente a los trabajadores, profesionales y no profesionales, sino también al servicio y a la atención del departamento antioqueño”, señaló.
El líder sindicalista agregó que la situación no se evidencia solamente en el despido de algunos trabajadores, sino también en el hecho de que a varios no les están renovando contratos, en apariencia sin mayores explicaciones, cuando en el hospital la constante ha sido una histórica renovación permanente de los mismos.
Consultado por este tema, desde el Hospital Alma Máter afirmaron que en octubre se notificaron cinco no renovaciones de contrato y tres terminaciones. Pero a su vez, este mismo mes, según respondieron, ingresaron 62 personas y en el mes de septiembre ya habían ingresado otras 68 personas.
La versión del hospital es que en noviembre se notificaron cuatro no renovaciones de contrato y una terminación de contrato, pero nuevamente apuntaron que en dicho mes ingresaron 15 personas. “La notificación de no renovación se hace un mes antes de terminado el contrato y obedece al requerimiento de especialidades en los diferentes servicios por ser un Hospital de alto nivel de complejidad”.
El Hospital rechazó las afirmaciones de Asmedas donde indican una masacre laboral. “Las cifras no mienten y el Hospital sigue avanzando con su mayor propósito de cuidar la salud de sus pacientes”. Y aseguraron que los movimientos contractuales responden a los requerimientos de los servicios. “Nuestro enfoque es la alta complejidad y se van requiriendo perfiles más especializados, pero frente a una planta de 2.400 el porcentaje es mínimo. Eso es importante porque es muy dinámico, pero mira todos los ingresos que hemos tenido”.
Además, explicaron que, en lo que a la entidad compete, cumplen con los estándares internacionales, los hospitales de alto a nivel de complejidad deben tener entre un 5% a un 10% de sus camas totales en el servicio de urgencias. “Actualmente, el Hospital Alma Máter ha mantenido esta proporción durante los meses mencionados y actualmente el hospital cuenta con 50 camas de urgencias, siendo uno de los servicios de urgencias más robustos de la ciudad”.
Lea también: Quemados por pólvora siguen aumentando en Antioquia: ya van 25 en tres días de diciembre
Por su lado, el médico Oliveros dice que a la situación se suma la disminución en la atención de pacientes en la institución, por dificultades que se han presentado, como la falta de medicamentos, el cierre de camas de hospitalización o la reducción de la atención en servicios de urgencias, lo que ha llevado a una menor facturación.
A principios de octubre pasado, la agremiación lanzó otra alerta porque la Clínica León XIII, del Hospital Alma Máter, tenía vacíos dos pisos en los que funcionaban unas 200 camas, lo que generó muchas críticas porque justamente la demanda de servicios venía creciendo en la ciudad como para que una institución de ese nivel complejidad dejara de prestarlos o los disminuyera. En su momento, desde el hospital contestaron que se trató de un cierre temporal de las 200 camas porque un proveedor de medicamentos e implementación médica terminó de forma unilateral un contrato que tenía suscrito con la institución.
Con casi 595 camas, el Alma Máter representa el 20% del total de Antioquia, según datos oficiales, y es el hospital con más camas de este departamento. Asimismo, mantiene una ocupación por encima del 95%, lo que hace a Asmedas preguntarse por qué querrían sacar personal, si ello no soluciona la crisis financiera, sino que, por el contrario, disminuye la capacidad instalada para atender pacientes con calidad, la mayoría de población vulnerable: el 70% de los pacientes forman parte del Régimen Subsidiado.
Oliveros, quien también trabaja en el Hospital Alma Máter, manifestó que persiste en este momento la escasez o intermitencia de algunos medicamentos y aseveró que aunque como asociación han tocado puertas en busca de soluciones de fondo, parece que no hay escenario en el que les hayan prestado real atención o propuesto salidas posibles, entre las que ellos creen que podrían estar el aumento de contratos enfocados, por ejemplo, en restablecer los servicios de medicina domiciliaria o la consulta externa.
“Desde el 21 de septiembre hasta el 21 de noviembre de 2024, el resultado fue dos meses de reducción en la facturación hasta de un 70%. Se calcula más de 30.000 millones de pesos en perdidas irrecuperables durante estos dos meses”, señalaron en la carta al CSU, en la que criticaron el papel “pasivo” que este habría jugado frente a la situación hasta el momento.
Según datos del hospital, en este momento cuentan con unos 2.380 colaboradores vinculados. Hay 419 médicos entre generales y especialistas, 1.031 personas del área de enfermería, 194 en el equipo paraclínico y 736 personas de personal administrativo.
Además puede leer: Quejas crecen 38% y deuda un 22% en la EPS Savia Salud, pese a su intervención