La Alcaldía de Medellín anunció que abrió una convocatoria que busca cerca de 300 establecimientos como bares y discotecas con el fin de hacer parte de la estrategia de prevención y control del ruido.
Como en muchos casos, la gestión del ruido por parte de los comerciantes depende de los conocimientos que poseen para regularlo. El programa pretende darles herramientas que les permita conocer, evaluar y generar un criterio sobre los niveles de sonido que usan para sus actividades.
Por ello, la convocatoria busca brindar acompañamiento técnico especializado a los establecimientos seleccionados para evitar que al interior de ellos se genere ruido excesivo que termine afectando a la comunidad circundante, hecho que puede terminar en multas y sanciones.
Los bares y discotecas interesados deben inscribirse a través del siguiente enlace, y entrar en el proceso de selección que estará vigente desde el 5 de marzo hasta llenar cupos.
La selección se realizará con base en criterios como cumplimiento de usos de suelo, colindancias, historial de quejas y área del local, buscando generar un mayor impacto con la estrategia.
Los establecimientos seleccionados recibirán asesoría técnica, capacitaciones y herramientas como decibelímetros para fomentar el autocontrol y el cumplimiento de la normativa ambiental. La implementación del programa se desarrollará entre 2025 a 2027.
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“Con esta estrategia, no solo buscamos reducir los impactos ambientales, sino también fortalecer la relación entre los establecimientos nocturnos y la comunidad. Queremos que los bares y discotecas sean aliados en la construcción de una ciudad más sostenible y habitable en la que el control del ruido sea un factor clave para la calidad de vida”, señaló el subsecretario de Gestión Ambiental, Carlos Velásquez.
Según las autoridades de Medellín, las zonas de rumba con mayores niveles de ruido se hallan en el Parque Lleras y Provenza; la carrera 70 entre transversal 42 y circular 5; y en la Avenida de Greiff entre carrera 53 y calle 54 así como la avenida La Playa entre avenida oriental y la carrera 43 Girardot.
De otro lado, en una lista de 2024 aparece que algunos de los barrios con mayores quejas de ruido en Medellín son: el corregimiento San Antonio de Prado, Boston, el Veinte de Julio, Bomboná y Loreto, entre otros.
La medida de la Alcaldía aparece justo cuando está a punto de darse inicio a la Ley Antiruido aprobada el año pasado por el Congreso y que contiene 25 artículos y hasta establece sanciones cercanas hasta los $40 millones para quienes no solo perturben a la comunidad con ruido excesivo, sino que además se nieguen a apagar el dispositivo que genere el ruido.