Ya van tres días desde que en Segovia y Remedios, Nordeste de Antioquia, están a la espera de noticias de Jaime Gallego, conocido entre familiares y amigos como Mongo.
Gallego es un líder social reconocido, en especial dentro del sector minero y de derechos humanos. Fue fundador de la Mesa Minera de Segovia y Remedios y en la actualidad preside la Mesa Minero Agroambiental del Nordeste Antioqueño, en la que ha impulsado grandes movilizaciones y paros en la última década.
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Adicionalmente, integra la Asociación de Víctimas del Nordeste, siendo sobreviviente de la masacre ocurrida en Segovia el 11 de noviembre de 1988, en la que fueron asesinadas 46 personas. También es militante de la Colombia Humana y del Pacto Histórico.
Gallego se encuentra desaparecido desde la mañana del pasado 3 de enero cuando acudió a una cita, al parecer, con algunos representantes del Clan del Golfo, un grupo armado que ha venido ganando incidencia en la zona y que tiene serios intereses y negocios con la minería ilegal de la región.
A pesar de que amigos y compañeros de trabajo le recomendaron a Gallego no acudir a la cita que era en una estación de servicio en los límites con el municipio de Vegachí, este acudió en compañía del escolta de la Unidad Nacional de Protección, Didier Berrío, que lo acompañaba por el riesgo que representaba su trabajo social y político en una zona con tantas problemáticas de violencia y orden público.
Cuando iba en camino al punto de encuentro fue la última vez que sus familiares y amigos tuvieron noticias de él. Ni siquiera las autoridades han dado con el paradero del carro en el que se movilizaban.
Desde entonces, en los municipios de Segovia y Remedios se han adelantado velatones y diferentes manifestaciones diarias para exigir la liberación con vida y en buenas condiciones tanto de Gallego como del escolta.
Sin embargo, hasta ahora no han recibido ninguna noticia del paradero de los hombres ni saben con certeza quién los tiene retenidos, aunque las versiones apuntan al Clan del Golfo, grupo al que inclusive el presidente Gustavo Petro señaló.
“El clan del Golfo presuntamente es el autor de la desaparición de Jaime Gallego líder de la Colombia Humana en Segovia, Antioquia. En nordeste antioqueño, como en el Magdalena Medio, han planteado la estrategia del neoparamilitatismo que será destruida”, aseguró el presidente Petro a través de su cuenta de X.
También desde la Consejería Presidencial para los Derechos Humanos manifestaron su preocupación por la desaparición de Jaime Gallego y de Didier Berrío. “Exigimos a los actores armados que respeten su vida e integridad personal y procedan a su pronta liberación”, escribieron también en X.
La única luz de esperanza que tienen los seres queridos de Gallego es un audio de un supuesto miembro de la UNP que dice haber recibido noticias de los captores, quienes aseguran que liberarán a los retenidos en las próximas horas.
Hay que recordar que antes de su secuestro, Gallego estaba promoviendo un paro minero en la región para exigirle al Gobierno Nacional restablecer el orden público de una región que lleva años sumida en una guerra sin tregua entre grupos armados por las rentas ilegales del oro, las drogas y las armas.
Ese paro, programado para el próximo 9 de marzo, sigue en firme, según los mineros de la región.