Es dialogante, no es buscapleitos, se llama Juan Fernando Cristo y ahora es ministro de la Política y tuvo el mismo ministerio cuando gobernaba don Juan Manuel Santos. Es un ministro cordial, pero no convenció su insípido globo del “Acuerdo Nacional” que propuso.
(Le pude interesar: Don Grego subirá al soñado trono).
En la peluquería una abogada rosarista opinó: “Es risible este gobierno. Propone gran acuerdo nacional mientras los super-jefes del petrismo Hollman Morris y Eduardo Montealegre demandan al expresidente Uribe y a María Fernanda Cabal”. Recuerden que en el juicio ‘pifiado’ al expresidente Uribe le chuzaron 34 días el celular dizque “por equivocación”.
¿Condenarán al expresidente Uribe? Mi amigo penalista, Juan Agustín, me aclaró: “No lo dudes, lo siguen atropellando y negándole derechos a su defensa”. Juan Agustín añadió: “Es un juicio político donde algunos exmagistrados en la sombra maniobran para que lo condenen”. Según Felipe Zuleta Lleras, “para joder a Uribe, para eso trajeron al locuaz Mancuso”. Para la historia: Mancuso ahora es consejero de paz. Punto.
En Colombia hay terremoto literario, circula la novela erótica-política de Dora Glottman La mujer del canciller.
Mundo amargo, hoy ni el rey Juan Carlos de Borbón consigue tranquilidad, la tele española viene mostrando fotos de hace 40 años en las que se besuquea con una actriz madrileña. “Que respeten sus 87 años y no lo jodan tanto”, les dije a las mujeres anti-Borbón en la peluquería. Punto.
En Colombia hay terremoto literario, circula la novela erótica-política de Dora Glottman La mujer del canciller. Es apasionante su menú: adulterios, racismo, clasismo, mucho sexo y maniobras de políticos del poder y la alta burguesía.
Es la historia de Bárbara Medina, una mujer rica, buen partido, de apellido notable, que descubre la felicidad con un amante joven costeño y ambicioso político. Es una excitante novela, difícil soltarla. Bravo por Dora Glottman, se gastó dos años escribiendo su golazo literario. Punto.
Fueron cancilleres el cachaquísimo Diego Uribe Vargas, también Carlos Lemos y Alfonso López Michelsen. Año 1968, era canciller Germán Zea y cometió una pifia monumental que indignó al Vaticano. Exigieron sacarlo o no viene el santo Papa a Colombia. Era presidente Carlos Lleras y le rogó a López Michelsen que lo sacara del problemón aceptándole ser canciller. En afanes, le tocó usar un sacoleva de Álvaro Escallón Villa.
Henry Kissinger fue canciller de Estados Unidos y mujeriego, él decía: “Para miles de mujeres el mejor afrodisiaco es el poder”.
Poncho Rentería