La familia de Alison Yesenia Villegas Ibarra, que vive en el barrio La Ceiba, de Yumbo, aún trata de comprender, cómo la joven de 23 años que emprendió un viaje por carretera desde su natal Valle del Cauca para llegar a Chile, terminó muerta en extrañas circunstancias, en una celda de una estación de Policía, ubicada entre Perú y Bolivia.
Estas instalaciones están situadas en el estado de Desaguadero. Según las autoridades del vecino país del Perú, informaron que se habría registrado una riña en un sitio de hospedaje para migrantes a donde había llegado Alison. Pero, la familia conoció informes de que el dinero que ella la vallecaucana tenía para su viaje se lo robaron y era el le había dado su pareja que se encuentra trabajando en Chile, hace seis meses.
Alison emprendió el viaje por un mejor porvenir en agosto pasado hasta que la familia se enteró de la confusa muerte el pasado 5 de octubre.
Sus allegados solo supieron que después de la riña en un hotel, Alison habría sido llevada a la estación de Policía de Desaguadero. Sin embargo, luego su cuerpo fue encontrado, pendiendo de una polea. Aunque algunos hablan de un presunto suicidio, todavía no es claro cómo y por qué murió.
La familia además de esperar más respuestas por parte de la Policía de Perú, está pidiendo ayuda a la Cancillería y toda persona para lograr repatriar los restos de Alison a Yumbo. Es así que está tratando de reunir $ 25 millones.
El drama aumenta, pues de la Fiscalía de Perú le informaron a los familiares de la colombiana que alguna persona debía viajar al día siguiente de la llamada ese 5 de octubre para entregar el cuerpo. De lo contrario, si no era reclamado terminaría en una fosa común en un cementerio de ese país.
CAROLINA BOHÓRQUEZ
Corresponsal de EL TIEMPO
Cali
Carolina Bohórquez Ramírez