Tras casi 24 horas de estar retenidos, los 60 militares que habían sido secuestrados en la vereda El Filo, entre Argelia y El Tambo, Cauca, fueron liberados.
En horas de la tarde de este sábado, el Ejército informó que el proceso de liberación de las tropas fue completado. “Ya se cumplió sin contratiempos el proceso de extracción y reposicionamiento de las tropas en otro punto del Cañón del Micay para continuar con las operaciones militares”, aseguró el Ejército en un comunicado.
El general Federico Mejía, comandante del Comando Específico del Cauca, confirmó la liberación de los militares, quienes habían sido rodeados por la comunidad local forzados por la presión de las disidencias de las Farc, según reportes de inteligencia militar.
Las tropas hacían parte de la operación Perseo, la misión que busca recuperar territorios dominados por grupos criminales en el Cauca, especialmente en la región del Cañón del Micay, un bastión estratégico para la estructura Carlos Patiño, una de las disidencias más activas de las Farc.
“Se trató de dos pelotones, 60 hombres que fueron retenidos por la comunidad. Sin embargo, nuestras tropas ya fueron liberadas y seguimos con la operación en el Cañón del Micay, donde están desplegados 1.400 hombres. Las operaciones contra estos enclaves criminales continúan”, afirmó el general Mejía.
También añadió que la comunidad, influenciada por las disidencias, justificaron sus actos argumentando que la presencia militar ponía en riesgo sus vidas debido a las confrontaciones constantes entre el Ejército y los grupos armados ilegales.
“La estructura Carlos Patiño se ha aprovechado del Cañón del Micay, lo que les permite proveerse de material bélico, reacondicionar explosivos y recuperarse de bajas. Es un área estratégica para ellos, y por eso hay tanta resistencia a nuestra presencia allí”, comentó Mejía.
El oficial también señaló que El Filo, junto con El Plateado, es clave para el control territorial de los grupos armados. “Desde ahí, pueden recuperarse, reabastecerse y coordinar sus actividades criminales. Por eso es tan importante nuestra misión de recuperar estos territorios y devolver la tranquilidad a la población civil”, agregó.
A pesar de las dificultades y las tensiones con la comunidad, el Ejército continúa con su misión en la región. Según Mejía, la operación Perseo sigue en marcha, y el objetivo es desmantelar las estructuras criminales que han sometido a la población local a la violencia y a economías ilícitas.