La Conferencia de las Partes de la ONU, que se desarrolla hasta el próximo primero de noviembre, entró en su semana más decisiva, en la que las diferentes delegaciones reunidas en Cali trabajan a toda marcha por concretar acuerdos que permitan el desarrollo de diferentes iniciativas de biodiversidad.Así, durante la octava jornada de la COP16, declarado como el Día de las Finanzas y la Biodiversidad, se discuten las metas de financiamiento del Convenio sobre la Diversidad Biológica (CDB). Por ello, el Banco Davivienda y la Corporación Financiera Internacional IFC anunciaron este lunes la firma de un acuerdo de suscripción para la emisión de un bono de biodiversidad por más de 210 mil millones de pesos en el mercado de capitales colombiano. El anuncio contó con la presencia, en el pabellón Colombia de la Zona Azul, de Susana Muhamad, ministra de Ambiente; Ricardo Bonilla, ministro de Hacienda; Javier Suárez, presidente del Banco Davivienda, y Alfonso García Mora, vicepresidente del International Finance Corporation (IFC) para Europa, América Latina y el Caribe.El objetivo de este instrumento es movilizar recursos para proyectos que persigan generar impactos positivos con la naturaleza y que protejan, conserven y restauren la biodiversidad colombiana. Lo que se alinea con el llamado Plan de Acción de Biodiversidad de Colombia al 2030. La meta es financiar numerosos proyectos de sostenibilidad, conservación y economía circular.Cabe recordar que Colombia es el segundo país más biodiverso del planeta, toda vez que es el hogar del 10 por ciento de la biodiversidad global, en apenas un 0,7 por ciento de la superficie terrestre. Pero, no es menos cierto que su riqueza natural enfrenta amenazas significativas que también afectan la economía nacional. En este contexto, Davivienda busca dirigir inversiones hacia soluciones sostenibles que minimicen el impacto negativo en los ecosistemas y usen responsablemente los recursos de la naturaleza. En ese sentido, diseñó un instrumento financiero para responder a la necesidad de abordar la pérdida de biodiversidad. Se trata de un bono, aprobado por la Superintendencia Financiera de Colombia (SFC), que espera convertirse en un hito para el desarrollo del mercado de capitales local entorno a la conservación y regeneración de la naturaleza. La emisión del bono tiene un plazo de cuatro años. Y con esta herramienta, la entidad financiera movilizará recursos hacia proyectos orientados a la conservación, manejo y aprovechamiento sostenible de los bosques naturales mediante la adopción de prácticas de restauración de suelos degradados, así como a la implementación de sistemas de tratamiento de aguas residuales, iniciativas de conservación y restauración de humedales y áreas marinas, entre otros.🔵 #AEstaHora desde el pabellón Colombia de la #COP16 la ministra @SusanaMuhamad, en compañía de @MinHacienda @RicardoBonillaG, anuncian un hito para la biodiversidad en el país: el primer bono de biodiversidad por $50 millones de dólares. 🌿 Estos recursos financiarán proyectos… pic.twitter.com/cpWObidm86— MinAmbiente Colombia (@MinAmbienteCo) October 28, 2024 Javier Suárez Esparragoza, presidente del Banco Davivienda, afirmó durante la firma del acuerdo: “Acompañamos la adopción de prácticas que promuevan la reforestación, la protección de las especies nativas y la resiliencia ecológica con soluciones basadas en la naturaleza. Gracias al trabajo en conjunto con la IFC, nuestro aliado de muchos años, con este bono de biodiversidad, desde la Casita Roja financiaremos proyectos que limiten el cambio del uso del suelo, conserven los ecosistemas sensibles y protejan la vida silvestre”. Y agregó que, en alianza con el Ministerio de Ambiente y Desarrollo Sostenible, se buscará que al menos el 10 por ciento de estos recursos aporten “a la restauración de los manglares en el Pacífico y potencien el desarrollo de las comunidades locales”. Según Davivienda, hasta el momento ha movilizado más de 1,5 billones de pesos en proyectos con beneficios para la biodiversidad relacionados con la gestión del agua, agricultura sostenible y bioenergía. De estos, cerca de 1 billón de pesos se han movilizado hacia agricultura sostenible con certificaciones avaladas internacionalmente.