La plenaria del Senado aprobó en sexto debate el proyecto de acto legislativo que busca reformar el Sistema General de Participaciones (SGP), para definir más transferencias del Gobierno Nacional a las regiones en el marco de la descentralización. Ahora la iniciativa sigue camino en la Cámara de Representantes y continúa generando grandes expectativas entre los líderes locales.
El ministro del Interior, Juan Fernando Cristo, celebró la aprobación como “un avance en materia de autonomía para los territorios”, afirmando que la decisión traerá un impacto positivo para las regiones más vulnerables del país.
La reforma tiene como objetivo “rediseñar las competencias y responsabilidades de los departamentos, distritos y municipios”, permitiéndoles gestionar con más independencia los recursos en áreas como salud, educación y servicios públicos.
Con esta modificación, los recursos que reciben los territorios del gobierno central serán, como mínimo, el 39,5 % de los ingresos corrientes de la Nación. Este cambio no solo busca brindar más recursos a las regiones, si no permitirles administras de mejor manera el dinero según las necesidades particulares de las comunidades.
El proyecto espera abordar lo que muchos llaman uno de los problemas históricos de Colombia: el centralismo. Para el senador Ariel Ávila, coordinador ponente del proyecto, “este es el mejor acuerdo posible”, y añadió que las poblaciones más vulnerables “verán un cambio real con esta medida”. La decisión busca que los municipios que enfrentan dificultades económicas tengan un respiro y una mayor capacidad para atender sus necesidades básicas.
El ministro Cristo también anunció que la reforma está diseñada para ir de la mano con la Ley de Competencias, que permitirá transferir funciones específicas a los territorios y asegurar la sostenibilidad fiscal del Estado.
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El nuevo diseño del plan de autonomía territorial se hará en conjunto con el Ministerio de Hacienda, el Departamento Nacional de Planeación, gobernadores, alcaldes y expertos académicos. Además, se formará una mesa de concertación para ajustar los detalles de la implementación para realizar las asignaciones según las capacidades y necesidades.
La discusión en el Congreso aún no termina. El proyecto debe pasar a la Comisión Primera de la Cámara de Representantes para su séptimo debate, donde se seguirán analizando los artículos específicos.
El presidente Gustavo Petro ya lanzó una serie de condiciones para apoyar la iniciativa, que generó fricciones entre el ministro de Hacienda, Ricardo Bonilla –que alerta que el proyecto pondría en riesgo las finanzas de la Nación y no sería viable fiscalmente–, y el ministro del Interior, Juan Fernando Cristo, que respalda irrestrictamente la reforma.