Después de una clara derrota, la vicepresidenta Kamala Harris se dirigió a sus seguidores desde la Universidad Howard, su Alma Máter en Washington D.C. Allí asumió oficialmente su derrota en las presidenciales frente a Donald Trump.
Con un discurso que dejó ver la nostalgia del fracaso, también le dio lugar a la esperanza; Harris reconoció los resultados y dejó claro que, aunque el desenlace no era el esperado, el trabajo por los valores demócratas continúa.
“Debemos aceptar los resultados de estas elecciones”, dijo Harris, refiriéndose a la victoria del expresidente y su regreso a la Casa Blanca.
“Hoy temprano hablé con el presidente electo Trump y lo felicité por su victoria”, añadió la vicepresidenta, enviando un mensaje de respeto a la democracia. En sus palabras, subrayó la importancia de una entrega de poder pacífica y ordenada, afirmando que están comprometidos con hacer una sana transición.
“El resultado de estas elecciones no es lo que queríamos, no es por lo que luchamos, no es por lo que votamos”, dijo con sinceridad, compartiendo la frustración de muchos de sus partidarios. Pero también recordó que el camino de su lucha política sigue abierto: “Escúchenme cuando digo que la luz de la promesa de Estados Unidos siempre brillará mientras nunca nos rindamos y sigamos luchando”.
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La vicepresidenta, que durante la campaña centró su mensaje en la inclusión y el respeto a la democracia, reiteró su compromiso de trabajar por un país más justo, aunque ahora sea desde una posición diferente. “Vamos a colaborar para asegurar que este país siga siendo un espacio de oportunidades y justicia”, afirmó.
Harris también se dirigió especialmente a las minorías y a los jóvenes, grupos que fueron clave en su campaña. “Ustedes son el futuro de este país”, dijo, mirando a los estudiantes y jóvenes que la escuchaban atentamente. A pesar de la derrota, Harris los alentó a seguir participando y defendiendo sus derechos, reiterando que ellos tienen el poder de influir en el rumbo de Estados Unidos.
Con la el reconocimiento de Harris, el camino está despejado para que Donald Trump inicie su segundo mandato. Su regreso a la Casa Blanca representa un cambio de rumbo en varias políticas, desde la economía hasta la seguridad nacional. Harris cierra su contienda dejando claro que el gobierno demócrata saliente apoyará la transición, demostrando su compromiso con la institucionalidad.
“Los resultados no son siempre los que esperamos, pero la democracia es precisamente aceptar lo que decide el pueblo. No nos rendimos, porque sabemos que cada lucha, cada voto, cada voz cuenta para construir el país que queremos”.