Hay conmoción en el departamento de Cundinamarca tras un violento atraco que terminó en el asesinato de un reconocido comerciante de la región junto a su mayordomo. La esposa del empresario también resultó herida.Los hechos se registraron el pasado lunes, 11 de noviembre, en el municipio de Guaduas, donde delincuentes ingresaron a una finca ubicada en la vereda El Hato y ante la presencia de los residentes atentaron contra ellos.Las autoridades fueron alertadas de lo sucedido y al llegar al lugar ubicado aproximadamente a dos horas de Bogotá, se encontraron con la macabra escena en la que fueron acribillados las víctimas y abandonadas en una zona rural de la finca. Por su parte, el coronel Juan Carlos Arévalo, subcomandante de Policía de Cundinamarca, dio a conocer detalles de este violento crimen:“Se hallaron dos cuerpos sin vida en una zona boscosa al interior de una finca, los cuales presentaban impactos por arma de fuego. Las víctimas son el propietario de la finca, quien se dedicaba a la ganadería y su mayordomo”, detalló el oficial.De acuerdo con las investigaciones de las autoridades, el comerciante fue identificado como Luis Alfonso Valencia, fundador de Arepas El Carriel. Mientras que se desconoce la identidad del mayordomo.La esposa del ganadero, quien también fue herida con arma de fuego, logró sobrevivir al ataque y fue trasladada a un centro asistencial, donde su pronóstico es reservado.De forma inicial, la Policía indicó que el delito estaría vinculado a un robo, ya que los presuntos responsables hurtaron varios objetos personales, además de un automóvil y una motocicleta.“Este lamentable suceso habría ocurrido presuntamente por el hurto de elementos personales, como también el hurto de un vehículo y una motocicleta. Los hechos están siendo materia de investigación por parte de nuestra Policía judicial y nuestra Fiscalía con el fin de lograr la ubicación y captura de los responsables”, agregó el coronel Arévalo.Luis Alfonso Valencia era una figura conocida no solo en Guaduas, su ciudad natal, sino también en el occidente de Bogotá, donde había logrado forjar una sólida reputación. Su nombre era reconocido principalmente por su papel como cofundador de un negocio denominado El Carriel, ubicado en la localidad de Engativá. Este establecimiento, que rápidamente se ganó la preferencia de la comunidad, era conocido por su enfoque en ofrecer productos y servicios de calidad, lo que le permitió consolidarse como un punto de referencia en la zona.A través de su trabajo en El Carriel, Valencia no solo había logrado establecer una fuente de ingresos sostenible, sino que también había generado una red de contactos y amigos en la comunidad, lo que le permitió fortalecer su presencia en la localidad. Su negocio se convirtió en un espacio importante para los vecinos de Engativá, quienes acudían no solo por los productos que ofrecía, sino también por la confianza y el trato amable que él y sus socios brindaban.El reciente fallecimiento de Alfonso Valencia ha conmovido profundamente a quienes lo conocían y lo apreciaban. A través de las redes sociales, allegados, amigos y compañeros de trabajo han expresado su dolor y tristeza, recordando a Valencia no solo por su destacada labor empresarial, sino también por su incansable esfuerzo y dedicación a su familia y a su comunidad.Muchos han destacado su carácter emprendedor, calificándolo como “un hombre trabajador, luchador y creador de empresa”, alguien que siempre estaba dispuesto a enfrentar los retos con determinación y a brindar lo mejor de sí en cada proyecto que emprendía.“Que tristeza siente mi corazón cuando personas como Alfonso Valencia parten de este mundo terrenal por culpa de la delincuencia”, “Que mi Dios le dé su santa gloria, fue buen personaje y buen vecino”, fueron algunos de los comentarios.