Wilder Medina es de las pocas personas que tocaron fondo en el consumo de drogas y alcohol, pero que pudieron salir de ese hueco para contar sus vivencias y evitar que otros jóvenes caigan en lo mismo.No duda en contar todo lo que le ha pasado porque tiene claro que su testimonio podría salvar a otras personas que están pasando por su misma situación o que sencillamente están en entornos que los puede llevar al consumo.El exfutbolista tiene claro que haber sido sancionado por doping recortó su carrera deportiva porque muchos lo calificaron de “marihuanero” y le costó quitarse ese estigma. De hecho, todo ocurrió cuando estaba en el mejor momento futbolístico en el Deportes Tolima, equipo en el que fue goleador. “Fue muy duro cuando salió la sanción y dije; claro, la embarré. Mi carrera iba en ascenso, me pedían para la Selección Colombia y por eso le cogí tanto respeto a las drogas y en este caso a la marihuana porque eso me acortó la carrera futbolística”, dijo en Sin Filtro de SEMANA.Medina asegura que “Dios permitió que me equivocara de esta forma para ayudarle a otros a través de mi testimonio. Cometí errores y me han servido para ser la persona que soy hoy en día”.Agregó: “Me metieron un año de sanción y dije: me cortaron las piernas. Como a muchos equipos no les gustó que me metieran una sanción tan corta, pues enviaron una carta pidiendo que me sancionaran y me dediqué a tomar y a fumar marihuana”.Tiene la certeza de que todo lo que le pasó le da autoridad moral para hablarles a los jóvenes y advertirles sobre los peligros de la droga y el alcohol. “Por eso siempre envío mensajes de que sí se puede, uno se cae, pero se levanta y que la experiencia de los errores lo ayudan a uno a ser mejor persona. Yo toqué muchas veces el fondo, yo he sido un privilegiado de Dios y estoy para dar un testimonio bonito”.Justamente eso que le pasó en el Tolima fue en detonante en su vida y fue un momento de ellos en los que se considera que tocó fondo por los problemas de adicción que tenía.“En ese año de sanción yo tomaba todos los días, hubo una vez que me perdí casi 10 días y me estaban buscando y ofrecieron recompensa. A mí se me destruyó vida y me metí en un apartamento a tomar y a consumir. Yo ya tenía 31 años y pensé que se iba a acabar todo para mí. En la 37 en Ibagué me la pasaba. Salía del estadio y me iba por ahí a tomar, supuestamente con amigos, eran personas que manejaban muchas vueltas y eso me hizo recordar todo lo que pasó en Rionegro cuando estuve en pandillas”.En la capital del departamento del Tolima se la pasaba por todos los barrios que eran considerados peligrosos y allí era acogido por las personas que le tenían admiración. “Duré esos 10 días sin bañarme ni nada y eso es tocar fondo. En una fiesta como de cuatro días supe cómo salí y la gente me cuido. Todo eso llegó a los oídos de Gabriel Camargo y eso detonó mi salida del Tolima”.Con el paso de los años, la ayuda de su pareja y mucha gente a su alrededor ya puede decir que está por fuera de las drogas y del alcohol. “Veo a la gente fumar y tomar y ya no me dan ganas, eso sí, denme comida y disfruto. Yo le cogí fastidio al olor de la marihuana, lo percibo y me doy cuenta, es que un olor bastante maluco”.Actualmente, el exfutbolista es creador de contenidos en redes sociales y se alejó totalmente del alcohol y las drogas.