Una victoria agridulce tiene entre sus manos el Gobierno Nacional, al destacar una cifra récord en incautación de cocaína este año, en medio de los más grandes promedios de cultivo de coca y producción potencial de esa droga en la historia de Colombia.
El Ministerio de Defensa informó que entre el 1 de enero y el 31 de octubre de 2024 se decomisaron 772,4 toneladas de cocaína, superando las 637,4 ton que se habían incautado en el mismo periodo del año pasado y de paso las 746 ton. de todo el 2023.
Pero el logro va más allá: sin siquiera terminar la presente anualidad, ya se obtuvo el decomiso más grande de la historia en la lucha contra el narcotráfico, según los registros oficiales, que datan de 2010.
Esta estadística contrasta con los peores resultados en materia de erradicación de la última década. A octubre 31 de 2024, las autoridades solo habían erradicado 6.096 hectáreas de coca; antes de ese resultado, el antirrécord se había documentado en 2014, con 8.707 hta.
La eliminación de los cultivos ilícitos viene en franca caída desde 2020, cuando la Fuerza Pública acabó con 101.676 hta; en 2021 fueron 70.173; en 2022, 59.251; y en el mismo lapso de 2023, 15.419.
Esta tendencia, que comenzó con la prohibición de la fumigación aérea con glifosato y se acrecentó durante los diálogos de La Habana con las antiguas Farc, terminó cayendo severamente por las políticas del presidente Gustavo Petro, quien para descriminalizar la labor de los campesinos cultivadores, les ordenó a la Policía y a las Fuerzas Militares que concentraran su labor antinarcóticos en la interdicción de los cargamentos.
Una de las consecuencias de esa decisión fue el incremento desmedido de las áreas sembradas. Según el Sistema de Monitoreo de Cultivos Ilícitos (Simci) de la Oficina de la ONU contra las Drogas y el Crimen, entre 2022 y 2023 las hectáreas pasaron de 230.000 a 253.000.
Aunado a eso, la producción potencial de cocaína pasó de 1.738 toneladas métricas anuales a 2.664, lo que refleja que se está produciendo más alcaloide con fines de exportación y consumo interno en Colombia.
El escenario atrae como moscas a grupos de narcotráfico transnacional. Tal cual ha venido informando EL COLOMBIANO, en nuestro país se han detectado actividades de 19 grupos mafiosos extranjeros, provenientes de 16 naciones.
En la lista están los carteles mexicanos de Sinaloa, Jalisco Nueva Generación y del Golfo; las mafias italianas ‘Ndrangheta, Camorra y Cosa Nostra; y los grupos Saric, Amerika y Keka, de Los Balcanes.
Colombia conserva el primer puesto en la producción de cocaína y eso lo convierte en un jugador fundamental en el mercado de la droga. Según la ONU, en la última década el número de consumidores de estupefacientes en el mundo aumentó un 20%; en ese conjunto, 25’255.000 personas han consumido cocaína.
Otro incentivo que tienen los narcos colombianos es la devaluación del peso frente al dólar. Según el Banco de la República, este año se ha incrementado esa devaluación frente al 2023, y hoy un dólar cuesta 4.414 pesos, lo que favorece a los inversionistas de este negocio transnacional, pues al invertir en pesos y cobrar en dólares, su rentabilidad es muy superior.
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