El periodista y exconcejal Edgar Garay fue asesinado a tiros el pasado 4 de diciembre cuando se movilizaba en su vehículo por la carretera que comunica al municipio de Corozal (Sucre) con el aeropuerto Las Brujas.
Se trata de un comunicador y exconcejal de Corozal que había denunciado amenazas en su contra y que fue protagonista de varios escándalos y polémicas.
Su muerte ha conmocionado a la región y despierta sospechas de un posible ajuste de cuentas o un supuesto plan para silenciarlo por las denuncias y opiniones que hacía a través del programa “Édgar lo dice”.
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Hace más de un año, una investigación de la Revista Cambio reveló que Garay quería confesar que había cometidos varios delitos junto a Mario Fernández Alcocer, exsenador, diputado de Sucre y primo de la Verónica Alcocer, Primera Dama. Pero la periodista de esa región, Laura Ardila, reveló que en realidad Garay tuvo una relación con Fernández hace varios años y que más recientemente hacía parte del grupo político del exgobernador liberal Héctor Olimpo Espinosa. “La “confesión” que Garay hace a la revista de haber cometido delitos junto a Fernández Alcocer se da en el marco de las elecciones regionales 2023, en las que Mario Fernández Alcocer se disputaba la gobernación con Lucy García, quien precisamente era la candidata de Héctor Olimpo Espinosa (hoy ella es la gobernadora)”, dijo Ardila en sus redes sociales.
La versión que Garay le había dado a Cambio era diferente, pero no se conocían los detalles de sus movimientos políticos locales del lado de Olimpo. “En varios escenarios él me acusó a mí de algunos hechos en los cuales él también estaba implicado, pero solo me acusaba a mí (...) entonces yo para defenderme saqué ese espacio llamado ‘Edgar lo dice’”, le había dicho Garay a Cambio. Garay se habría distanciado de Fernández Alcocer en 2022 a pesar haber sido su jefe de campaña en Corozal en el pasado, varias fotos y registros desde hace más de 10 años registran esa cercanía.
Sin embargo, medios locales señalan que después de ese distanciamiento, el comunicador también se convirtió en un difusor de los logros del alcalde de Sincelejo, Yahir Acuña.
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Garay Álvarez había sido capturado en mayo de 2024 porque manejaba una camioneta reportada como robada. Le imputaron los delitos de receptación, falsedad marcaria y uso de documento falso, ya que al parecer llevaba una licencia de tránsito falsa, las placas del automotor tampoco eran auténticas.
Tenía detención domiciliaria. Además, el periodista tenía varias anotaciones de denuncias por presuntas injurias y calumnias.
Las autoridades señalaron que a Garay lo asesinaron con una pistola nueve milímetros con seis tiros de los cuales uno impactó en su cabeza. Hay una recompensa de 20 millones de pesos por este crimen. Aún no se conocen los detalles del crimen ni de las actividades a las que se dedicaba el periodista en los últimos meses.