En un hecho poco común, una mujer en Ibagué ha interpuesto una tutela afirmando ser objeto de espionaje por parte de los Estados Unidos, acusando directamente al presidente Joe Biden y su vicepresidenta Kamala Harris.
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Cuál es la prueba de la colombiana que demandó a Joe Biden
La demandante solicita una compensación de 50 millones de dólares, alegando que se implantó en su cuerpo un dispositivo para monitorear sus movimientos. La denuncia se originó tras no recibir respuesta a un derecho de petición enviado al presidente estadounidense, situación que la demandante describe como un “silencio administrativo positivo”, según indica revista Semana.
Además, argumenta que este silencio es una prueba de la veracidad de sus afirmaciones y hace referencia a una supuesta señal en su cuerpo que demostraría el espionaje, aunque no se han presentado pruebas concretas al respecto, de acuerdo con la revista.
Este tipo de casos plantea retos significativos para el sistema judicial, ya que consume recursos y tiempo que podrían ser destinados a resolver litigios más fundamentados y con impacto directo en la comunidad. Los jueces se ven en la encrucijada de tener que dedicar atención a demandas que, a primera vista, parecen carecer de fundamento sólido basado en evidencias tangibles.
La mujer, por su parte, insiste en que su caso merece ser considerado con seriedad y espera que la falta de respuesta a su derecho de petición sea interpretada como una admisión de culpabilidad por parte de los funcionarios estadounidenses involucrados. Mientras tanto, el sistema judicial deberá evaluar los méritos de la tutela y decidir si procede según los estatutos legales del país, según el citado medio.
La demandante ha manifestado su intención de llevar el caso hasta las últimas consecuencias, poniendo a prueba la capacidad del sistema judicial de manejar situaciones inusuales y complejas en términos legales, de acuerdo con el portal en mención.