Teddy Wittemann, un joven surfista de 16 años, fue víctima de un ataque de tiburón en la costa de Brevard, Florida, Estados Unidos, mientras practicaba su deporte favorito. A pesar de la aterradora experiencia, asegura que no dejará de perseguir su sueño de convertirse en surfista profesional.
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El viernes 11 de octubre, Teddy Wittemann estaba disfrutando de una jornada de surf en las agitadas aguas de una playa en el condado de Brevard, Florida. Las olas eran fuertes debido al reciente paso del huracán Milton, lo que hacía que la sesión fuera perfecta para los surfistas más experimentados. Sin embargo, lo que parecía ser otro día de adrenalina y diversión se convirtió en una situación de vida o muerte cuando Teddy fue atacado por un tiburón.
Mientras surfeaba, Teddy perdió el equilibrio y cayó al agua. Fue en ese momento cuando sintió algo extraño en su brazo. “Sentí una presión fuerte a mi lado, y cuando miré, ahí estaba el tiburón”, relató el joven.
Según los informes de la estación local WESH, Teddy supo de inmediato lo que estaba ocurriendo: un tiburón toro de aproximadamente seis pies lo había mordido. Afortunadamente, el tiburón solo lo atacó una vez antes de nadar lejos.
El ataque ocurrió a unos 200 pies de la costa, en un momento en que las olas eran más grandes de lo habitual, producto del huracán que acababa de azotar la zona. Aunque el tiburón no persistió, el daño estaba hecho. Wittemann estaba gravemente herido y comenzó a sangrar de manera preocupante.
En medio del pánico, el joven no perdió la compostura. Sabía que debía volver a la orilla lo más rápido posible, pero también estaba consciente de que su brazo ensangrentado podría atraer a más tiburones. “No podía dejar de pensar que otro tiburón podía aparecer en cualquier momento”, explicó más tarde.
Al llegar a la playa, Wittemann fue ayudado por un grupo de bañistas. Entre ellos estaba Dave Crespi, un surfista veterano que conocía a Teddy. Crespi no dudó en quitarse la camiseta y usarla para presionar la herida del joven, con el objetivo de detener la hemorragia. Junto a otros presentes, lograron llevar a Teddy hasta la carretera cercana, donde un vecino que conocía a la familia lo ayudó a contactar a sus padres antes de que fuera trasladado al hospital.
Una vez en el centro médico, los doctores le suturaron el brazo con 30 puntos y le colocaron un yeso para inmovilizarlo. Wittemann pasó dos noches bajo observación antes de ser dado de alta. Los médicos fueron claros: tendría que esperar a que su herida sanara completamente antes de volver a surfear.
Pero ni un ataque de tiburón puede detener a este apasionado del surf. “Tan pronto como mi brazo esté bien, volveré al agua. No hay nada que ame más que surfear”, declaró Wittemann con determinación. “Es mi sueño, quiero ser un surfista profesional”.
Teddy ya ha logrado importantes hitos en el mundo del surf. Forma parte del equipo masculino sub-16 de USA Junior Surfing y ha competido en numerosas ocasiones en la serie USA Surfing Prime.
Además, ha sido dos veces campeón de la USA Surfing Prime East Coast, ha ganado títulos en la National Scholastic Surfing Association East Coast y la Eastern Surf Association.
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Con un futuro prometedor por delante, Wittemann no tiene intención de que este desafortunado encuentro con un tiburón lo aleje de su pasión. Para él, las olas siguen siendo su segunda casa, y su objetivo de alcanzar el profesionalismo en el surf está más presente que nunca.
Aunque algunos podrían dudar en volver al océano tras una experiencia tan traumática, Teddy lo ve de otra manera. “El surf es lo que amo. No puedo imaginar mi vida sin el”, afirmó. Con una fuerza y coraje admirables, este joven surfista sigue mirando al horizonte, listo para enfrentarse a las olas, sin importar lo que pueda haber bajo la superficie.