Israel confirmó la muerte de Hachem Safieddine, el esperado sucesor de Hassan Nasrallah al frente de Hezbolá. Por su parte, el movimiento chií libanés ha afirmado haber lanzado numerosos cohetes, sobre todo en dirección a Tel Aviv.
El ejército israelí confirmó el martes que Hashem Safieddine, considerado el candidato más probable para sustituir a Hasán Nasralá al frente de Hezbolá, había sido asesinado. En un comunicado publicado en X, el ejército israelí dijo que Safieddine había muerto en un ataque en Beirut hace unas tres semanas. “Ahora puede confirmarse que, en un ataque perpetrado hace unas tres semanas, Hashem Safieddine, jefe del consejo ejecutivo de la organización terrorista Hezbolá, y Hussein Ali Al-Zeima, jefe de la oficina de inteligencia de Hezbolá, fueron eliminados en los suburbios del sur de Beirut, junto con otros comandantes de Hezbolá”, declaró el ejército israelí.
Catalogado como “terrorista”
Safieddine mantenía estrechos vínculos con Irán, donde cursó sus estudios religiosos. Su hijo está casado con Zeinab, la hija del poderoso general iraní Qasem Soleimani, muerto en 2020 en un bombardeo estadounidense en Irak. Era uno de los miembros más importantes del Consejo de la Shura y, al igual que el talbién asesinado Nasralá, portaba el turbante negro de los Sayed, un signo con el que se identifican los descendientes del profeta Mahoma.
Hasán Nasralá había sido catalogado como “terrorista” por el Departamento de Estado estadounidense en mayo de 2017, así como por Arabia Saudita.
Hezbolá, financiado y armado por Irán, fue creado en 1982 durante la guerra civil en Líbano, a iniciativa de los Guardianes de la Revolución de Irán.
Con agencias