El pasado 15 de octubre, la comunidad de Bogotá fue sacudida por un desgarrador incidente en la carrera Séptima con calle 173, donde Juan Felipe Camargo, un estudiante de nueve años, fue arrollado por una camioneta BMW mientras salía de su escuela, el Colegio José Joaquín Casas.
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Acompañado por su padre, Juan Sebastián Camargo, y su abuela, el joven intentaba cruzar la calle cuando fue impactado por una camioneta BMW modelo 2024, conducida por Jasbleidy Díaz Barraza. En una entrevista con Semana, Luz Marcela, la madre del menor, compartió los angustiantes detalles del suceso.
La mujer describió cómo su esposo verificó la ausencia de tráfico antes de cruzar, pero la camioneta, que se encontraba detenida, aceleró repentinamente, golpeando a su hijo y a su madre. El vehículo, operando a alta velocidad, también colisionó con otros siete automóviles. Testigos en la escena relataron que la conductora estaba hablando por celular justo antes del accidente, desvirtuando su afirmación inicial de que estaba rezando el rosario.
Cómo está la abuela del menor que murió atropellado en Bogotá
Además, según algunos presentes, Díaz Barraza mostraba signos de haber consumido alcohol, aunque esto aún no ha sido oficialmente confirmado por las autoridades. Juan Felipe fue rápidamente trasladado al Hospital Simón Bolívar, donde lamentablemente sucumbió a sus heridas.
Su abuela sufrió lesiones graves y ha quedado profundamente traumatizada, enfrentando severos trastornos psicológicos y físicos. La reacción a la pérdida ha sido devastadora para Luz Marcela, quien recuerda a su hijo como un niño vibrante y alegre, apasionado por actividades como la natación y el piano.
“Era una luz en nuestras vidas”, mencionó con profundo dolor. En cuanto a la conductora, actualmente sigue en libertad mientras progresa la investigación judicial. Luz Marcela expresó su esperanza de que el caso no quede impune y exigió justicia.
Finalmente, en respuesta a las declaraciones de la conductora y su familia publicadas en El Tiempo, en las que insistían en que el suceso fue un accidente y negaban el consumo de alcohol, la madre afligida declaró: “Solo puede verla como una asesina que debe enfrentarse a las consecuencias de sus actos”.
“Esperamos que se haga justicia, que esta tragedia no quede solo en nuestras memorias como una estadística más”, concluyó Luz Marcela, haciendo un llamado a la comunidad y a las autoridades para asegurar una resolución justa y adecuada.