El republicano Donald Trump y la demócrata Kamala Harris se enfrentarán en las urnas el 5 de noviembre para suceder a Joe Biden. Lo quieran o no, los candidatos a las elecciones estadounidenses deben posicionarse frente a los conflictos en Oriente Medio. En Israel, la campaña es observada con preocupación.
Por Michel Paul, corresponsal de RFI en Jerusalén
La actual administración estadounidense es sin duda la más favorable a Israel en la historia del Estado hebreo. Aunque los dirigentes israelíes no estén dispuestos a proclamarlo alto y claro. El presidente saliente de Estados Unidos, Joe Biden, se ha mostrado favorable a Israel en los últimos meses, aunque a veces no haya podido resistirse a soltar algunas palabras muy duras sobre el primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu. Pero Joe Biden siempre se ha declarado pro-Israel.
Evidentemente, la candidata demócrata y vicepresidenta saliente Kamala Harris intenta distanciarse de esta etiqueta. A veces hace deliberadamente declaraciones menos favorables, a veces en forma de lapsus. Recientemente, asintió cuando un manifestante habló de “genocidio” en Gaza. Luego intentó dar marcha atrás.
El ultraconservador Donald Trump, por su parte, presume de hablar casi a diario con Benjamin Netanyahu y ha asegurado que mantiene una muy buena relación con el primer ministro israelí. En Israel, sin embargo, recordamos que no hace mucho dijo que “Bibi” le había defraudado y que su ministro de Defensa era “un imbécil”.
La cautela de Benjamin Netanyahu
Hay mucha cautela en el caucus político israelí respecto a las elecciones estadounidenses. Las cosas pueden resumirse así: Benjamin Netanyahu anda con pies de plomo en lo que se refiere a las elecciones estadounidenses, pero su elección de candidato está clara. No es el caso de una parte de su coalición, que está abiertamente a favor de Donald Trump, en particular los ministros de extrema derecha Itamar Ben-Gvir y Bezalel Smotrich.
Pero todos los especialistas en Israel coinciden en un punto. Desde el día después de las elecciones estadounidenses hasta la toma de posesión del nuevo presidente, sean cuales sean los resultados, Joe Biden será el “lame duck” (pato cojo), como se suele designar a un mandatario cuando está por abandonar el poder.
Es probable que el enfrentamiento entre Joe Biden y Benjamin Netanyahu por la guerra en Gaza, Líbano y otros lugares de Oriente Próximo llegue a su clímax.
Los israelíes prefieren a Trump, según una encuesta
Según un sondeo publicado recientemente por el canal de televisión israelí Channel 12, en un hipotético escenario en el que los israelíes pudieran votar en las elecciones estadounidenses, Donald Trump gozaría de un apoyo abrumador. El 58% de los encuestados afirmó que votaría al candidato republicano, frente a sólo el 25% que lo haría por la vicepresidenta estadounidense y candidata demócrata, Kamala Harris. El 17% de los israelíes no tiene opinión.