El rostro y la camisa ensangrentada fueron las señales de que Darwin Felipe Beltrán había cometido el peor de los crímenes: matar a sus propios hijos de apenas 4 y 7 años.
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Y al parecer lo hizo con la mayor de la sevicia porque, según relatan los vecinos de este hombre en el barrio Las Ferias, en la localidad de Engativá, el hombre de 31 años abrió la cortina de la ventana de la habitación donde se quedó con sus pequeños hijos para que la gente viera cómo los golpeaba y apuñalaba tras discutir con su esposa por una supuesta infidelidad.
Esa desgarradora escena desató la furia de la comunidad que minutos después intentó lincharlo y dio aviso a las autoridades para que lo capturaran por lo que había acabado de hacer.
Cuando fue detenido por las autoridades en la tarde de este lunes, 28 de octubre, el hombre habría aceptado que mató a sus hijos y que lo hizo motivado por la ira de saber que su pareja, la madre de los niños lo había engañado. De hecho ya se habían separado desde hace una semana.
El hecho en sí mismo consternó a los vecinos, pero más aún porque, como mucho de ellos lo manifestaron, nunca vieron actitudes violentas en el hombre de 31 años y por el contrario, aseguraron que era tranquilo, integrado a su comunidad y muy unido con su familia.
“Solo lo conozco de donde jugaban fútbol. Trabaja en una empresa de alquiler de sillas. Un pelado bien, joven el chino. No sé nada más. Solo a él lo conocía. Lo veía jugar fútbol, tranquilo, no parecía sospechoso de algo”, comentó una de las vecinas a medios de comunicación.
Pero otra vecina, que al parecer era más cercana a Beltrán fue más allá y contó infidencias del presunto homicida.
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“Se me hizo muy raro. Sí tuvo un tiempo en las drogas. Hablaba mucho conmigo. Yo le decía que tuviera paciencia y le pidiera a Dios”, reveló.
La mujer detalló los problemas de pareja, que según le contó él, tenía con la madre de los niños. “Si él llegaba a la casa sin un peso ni para comer, ella –la madre de los niños– se la montaba. Él me preguntaba que qué hacía, si se iba o se quedaba. No parecía violento. Por eso se me hace extraño. Ellos eran como muy unidos”.
Según el diario El Tiempo, nuevas versiones sobre el hombre señalan que, al parecer, tenía problemas de salud mental y que, antes de lo ocurrido, habría incumplido una cita de control médico psiquiátrica que tenía programada.
De acuerdo con el comandante Operativo de Seguridad Ciudadana de la Policía Metropolitana de Bogotá, coronel Pedro Saavedra, el capturado tiene antecedentes judiciales por hurto, receptación y violencia intrafamiliar. Sin embargo, no tenía ninguna orden de captura en su contra.
Beltrán ahora enfrenta cargos por homicidio agravado y fue dejado bajo detención carcelaria.